- La firma guipuzcoana CAF ha sido descalificada en el concurso convocado por Renfe para renovar su flota de Cercanías que se conoce como el "megacontrato" al contemplar la cifra más alta que adjudica con un presupuesto de 2.726 millones de euros para el suministro de 211 de trenes de Cercanías de alta capacidad. Junto con CAF, también Talgo ha sido eliminada por decisión de la mesa de contratación, lo que provocó una reclamación de esta empresa que ha sido desestimada.

Esta decisión sitúa a la francesa Alstom y a la suiza Stadler como finalistas, tal y como publicó ayer el diario económico Cinco Días. Consultada por esta decisión, CAF ayer afirmó que de momento no ha recibido ninguna notificación de Renfe al respecto por lo que no se pronunciará hasta que esta información sea oficial.

No obstante, aseguró que en estos momentos todo el equipo centra sus esfuerzos en los próximos contratos que adjudicará Renfe, en principio en el transcurso del próximo 2021. La compañía de Beasain ha presentado las ofertas para dos contratos por los que Renfe se dotará de nuevos trenes regionales y de cercanías con presupuestos que, si bien no alcanzan los más de 2.000 millones del que finalmente ha sido descalificada, también son muy elevados.

En concreto, uno de ellos contempla el suministro de 43 unidades ferroviarias de media distancia por un presupuesto que supera los 500 millones de euros, mientras que en el segundo Renfe elegirá la empresa a la que encargar 38 trenes de cercanías por valor de más de 300 millones de euros. Los trámites iniciales se han cumplido, y los ganadores del concurso se conocerán a lo largo de 2021.

En este sentido, cabe recordar que CAF aplazó su decisión de cerrar la planta que dispone en Castejón en la que trabajan 110 personas hasta conocer si se adjudicarán alguno de los contratos de Renfe, lo que representaría una carga de trabajo que garantizaría la continuidad de la fábrica navarra.

Con su apuesta por los próximos contratos, la firma de Beasain decide centrarse en el medio plazo a la espera de la notificación oficial de Renfe sobre su "megacontrato" cuyo proceso de adjudicación no está siendo exento de polémica. El último episodio, según relata Cinco Días, se refiere a la eliminación de la firma guipuzcoana y de Talgo del concurso.

Talgo sí que interpuso una alegación a la decisión tomada por la mesa de contratación que ha mantenido paralizado el proceso durante 45 días, mientras el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales tomara una decisión. Finalmente, su resolución da la razón al dictamen de Renfe y estima la descalificación.

Otro punto de fricción se produjo a inicios del pasado mes de octubre, cuando la senadora del PNV Mertxe Garmendia denunció la exclusión de CAF del concurso de Renfe de más de 2.700 millones de euros con el argumento, según señaló, de que la oferta no cumplía con el nivel técnico exigido.

En aquella ocasión, Garmendia censuró el hecho de que no se concertara una fase de aclaraciones "como corresponde a un concurso que se ha resuelto por procedimiento negociado", más aún cuando CAF "es una empresa de solvencia técnica internacional demostrada en la fabricación de vagones".

En respuesta, la ministra de Industria, Reyes Maroto, afirmó que CAF sí había sido parte de la adjudicación de un lote de este concurso por valor de 380 millones de euros, que el PNV desmintió al señalar que esta adjudicación no pertenece al mismo contrato, en el marco de un escenario mucho más amplio.

La francesa Alstom y la suiza Stadler quedan finalistas para el contrato por el que se suministrarán 211 unidades de Cercanías

CAF centra sus esfuerzos en las próximas adjudicaciones de 43 unidades de media distancia por 500 millones y 38 de Cercanías por 300 millones