- La primera entidad financiera con sede en el País Vasco, BBVA, está a punto de recuperar el trono como primer banco en el mercado español si prosperan las conversaciones para fusionarse con el Banco Sabadell. Esta operación -dada la diferencia de balance más sería una absorción que una integración, en la misma línea que Caixabank con Bankia-, será posible tras haber cerrado primero el banco presidido por Carlos Torres la venta de su negocio en Estados Unidos, agrupado en torno a su filial Compass Bank -una pesada herencia del anterior mandatario Francisco González (FG)-, al grupo bancario norteamericano PNC en una operación valorada en 11.600 millones de dólares.

Con el dinero fresco de esta venta, el banco vasco no solo ha logrado mejorar sus ratios de solvencia sino que dispone de liquidez para entrar en operaciones corporativas desde una posición preeminente dentro del proceso de concentración bancaria que se está produciendo en España, y pocas horas después de comunicar la operación norteamericana, con la acción del BBVA disparada en Bolsa, la entidad financiera de Bilbao hizo pública una nota en la que reconocía que estaba negociando una posible fusión con el Banco Sabadell.

La entidad catalana tampoco pasa por su mejor momento y nunca ha ocultado que buscaba una operación corporativa para hacer frente a la dura coyuntura actual. En este sentido tras no prosperar la que se suponía primera alternativa, con Bankia, la entidad llegó a contactar con Kutxabank.

Desde el banco vasco surgido de las antiguas cajas se le dijo que ahora no tocaba embarcarse en operaciones de este calado, sobre todo, porque con su elevado nivel de solvencia, hoy por hoy, Kutxabank no necesita entrar en una operación en la que pudiera verse diluída su tradicional y prudente buena gestión.

Los contactos “preliminares”, pero seguro que muy avanzados, entre BBVA y Sabadell, un banco con unos activos totales de unos 200.000 millones de euros, para una posible fusión, daría lugar a un grupo con más de 950.000 millones de euros en activos y un tamaño en el Estado español de primer nivel, similar al que tendrá la unión de Caixabank y Bankia.

BBVA y Sabadell confirmaron a la CNMV sus contactos y el inicio de un proceso de revisión due diligence por parte de ambas entidades, así como la designación de asesores externos, si bien aclararon que no se había tomado ninguna decisión en firme sobre esta potencial operación.

De hecho, ambos bancos se curaron en salud por si las exigencias de alguna de las partes impidiese el acuerdo final señalando en la nota a la CNMV que “no existe certeza alguna de que se llegue a adoptar ni, en ese caso, sobre los términos y condiciones de una eventual operación” para crear un banco con 46.000 empleados y más de 4.200 oficinas en España, además de una importante presencia en México, Turquía y Reino Unido.

La operación BBVA-Sabadell, seguramente bendecida por las altas instancias del BCE y del Banco de España, se podrá producir tras el cierre del capítulo estadounidense por parte del BBVA.

Obviamente la venta del Compass Bank es una buena operación del actual equipo gestor del BBVA pero no deja de ser curioso que hace nada, en 2017, Carlos Torres, valoró la presencia del BBVA en el Compass como “estratégica” y lo señaló delante de la persona que el banco vasco había nombrado como consejero delegado en la filial norteamericana, profesional que no es otro que el actual máximo responsable del día a día de la entidad financiera de Bilbao, el ingeniero turco Onur Genç.

Como se recordará el desembarco de BBVA en Estados Unidos se produjo en el año 2007 con la compra, tras varios pequeños bancos regionales en Texas y California, de la entidad de ese país Compass Bank, en una operación de unos 9.115 millones de dólares.

La operación fue un empeño muy personal de Francisco González (FG), deseoso de estar en el primer mercado del mundo a toda costa, y, a la vista de los hechos, un fracaso al igual que la entrada y salida con pérdidas de China. La inversión generó polémica interna saldada con el cese del entonces director general Ignacio Sánchez-Asiaín, contrario a esta compra. La otra gran operación de FG, la de Garanti en Turquía, es la única que se mantiene.

BBVA esperaba que la filial norteamericana aportase un 10% del beneficio pero en sus últimos resultados solo suponía 4%. Para la compra de Compass, BBVA tuvo que ampliar capital en un 5,5% e inyectar fondos de diversas maneras incluso con la transferencia de una cartera de créditos de Compass a la sucursal de BBVA Nueva York, por 1.300 millones de dólares lo que permitió a la filial reducir el volumen de activos ponderados por riesgo.

950.000

La entidad resultante de la integración contaría con unos activos de 950.000 millones de euros.

148.000

Aunque ambas entidaes están reduciendo plantilla dispone de 148.000 empleados, de ellos unos 45.800 en el Estado español.

9.769

Entre los dos bancos suman 9.769 sucursales, de ellas en España, unas 4.200.

+15% y +24%

Ayer las acciones del BBVA subieron un 15,2% hasta 3,6 euros y las de Sabadell, un 24,5% hasta los 0,4 euros. Al inicio de la sesión de ayer BBVA capitalizaba 21.163 millones de euros y Sabadell, 1.892 millones de euros, once veces menos.