El grupo Uvesa ha anunciado el cierre de forma cautelar y temporal de su planta de Tudela tras la detección de un brote de covid-19 con 175 casos positivos confirmados por prueba PCR, lo que le convierte en el brote más importante en el ámbito laboral registrado hasta el momento en la Comunidad Foral.

Ha sido a última hora de la mañana cuando, después de una reunión en las instalaciones entre representantes de la empresa y del departamento de Salud, se ha dado a conocer el cierre, que había sido demandado por los sindicatos desde el momento en el que se confirmaron los 175 positivos en un cribado en el que se realizaron pruebas a 640 trabajadores, cribado que tendrá su continuidad con un chequeo serológico a toda la plantilla.

Este cribado selectivo se acordó después de haberse contabilizado 22 positivos en la empresa.

En esa reunión han participado el director general de Salud, Carlos Artundo, y el presidente del consejo de Administración del Grupo Uvesa, Antonio Sánchez, así como técnicos del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN) y del servicio de Seguridad Alimentaria del propio instituto.

Además, de las medidas acordadas en la planta, técnicos del ISPLN y de los equipos de Atención Primaria, en coordinación con entidades municipales y otros departamentos, trabajan ya en una "intervención integral y específica" para acompañar y reforzar el rastreo y seguimiento así como facilitar el proceso de aislamiento de los casos y sus contactos.

Tras reunirse con la representación laboral y comité de empresa, se ha dado a conocer lo acordado: el cierre cautelar y temporal de las instalaciones, a partir del sábado, con el objetivo de poder recuperar la actividad lo antes posible priorizando en la seguridad y salud de todos los trabajadores.

Durante este período de parón cautelar, y para dar solución a una situación excepcional, se reforzarán los protocolos anti covid existentes y se pondrán en marcha nuevas medidas preventivas igualmente excepcionales.

En este sentido citan la realización de pruebas de seroprevalencia a toda la plantilla (pruebas serológicas de alto rendimiento 'Elisa'), en concreto un total de 713 trabajadores, con la finalidad de proteger la seguridad de su personal y que el retorno a sus puestos de trabajo se realice con los máximos niveles de seguridad. Esos test sirven para medir la situación de inmunidad de la plantilla.

Limpiezas y desinfecciones adicionales

La compañía avícola ha anunciado además la realización de limpiezas y desinfecciones adicionales a las que se llevan a cabo diariamente, el refuerzo de los protocolos de distancias, prevención en zonas comunes o pruebas PCR obligatorias para cualquier nueva incorporación, así como para cualquier persona que regrese de su período vacacional.

La empresa agradece la colaboración y el apoyo prestado por el Servicio de Salud Pública de Navarra para buscar entre todos las mejores soluciones que contribuyan a revertir la situación actual.

La decisión del cierre de la planta es "compartida" y calificada como "lógica" por el alcalde de Tudela, Alejandro Toquero, quien confía que en pocos días la factoría vuelva a estar a pleno funcionamiento.

En la misma línea se han pronunciado los sindicatos que integran el comité de empresa, ELA, CCOO y UGT, que consideran "inevitable" el cierre en el contexto actual y esperan reanudar cuanto antes la actividad "siempre garantizando la salud y seguridad de todos y cada uno de los trabajadores", ya sean contratados directamente o de subcontratas.

Según los datos facilitados por el Gobierno Foral, de los 175 trabajadores positivos detectados en el cribado especial, 148 residen en localidades de la Ribera navarra (el 54 % en Tudela), y 28 entre Aragón y La Rioja.

Dada la dimensión del brote, el abordaje está requiriendo también de una implicación en clave integral y comunitaria en forma de un plan inmediato de intervención social en Tudela y pueblos de la Ribera afectados, más de una docena aunque en diferente grado.

Cuenta con la participación de Atención Primaria, Derechos Sociales, Servicios Sociales de base municipales, Protección Civil, o Políticas Migratorias y su objetivo, mediante visitas domiciliarias a personas en cuarentena o aislamiento, es conocer su situación y facilitar y prestar apoyo en todo lo que necesiten para que el confinamiento sea viable y eficaz.

No se descarta la puesta en disposición de recursos intermedios si fuera necesario.