- Félix Garciandia ya explicó cuando puso su cargo a disposición del Ejecutivo vasco que su acto era una llamada de atención sobre la situación en la que se encontraba el Puerto de Pasaia, necesitado con urgencia de actuaciones de mejora y optimización, y para afirmar que con ellas la viabilidad del recinto portuario estaba garantizada. En un comunicado publicado ayer, antes de conocer su cese, reiteró esta idea.

Garciandia advierte de que otras dársenas, como la cercana de Bilbao, abordan iniciativas que representan una clara mejora competitiva, e incide en que Pasaia también puede competir siempre y cuando se aceleren los proyectos. “La clave es el tiempo, no podemos esperar”, señala.

Las principales, en su opinión, hacen referencia a las comunicaciones. La privilegiada situación del Puerto de Pasaia lo hacen atractivo para empresas que desean operar desde o hasta Europa y, por este motivo, considera que optimizar las infraestructuras viarias, tanto carreteras como redes ferroviarias, resulta fundamental para dotar de “agilidad” al recinto portuario guipuzcoano.

Basa su argumentación en que reconocidas firmas como Algeposa, UECC o Toro Betolaza han apostado por este puerto con la reciente solicitud de ampliación de concesiones, que fueron concedidas en una reunión del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria el pasado 17 de julio.

La respuesta a esta propuesta no será inmediata, dado que en la actualidad el Puerto de Pasaia se encuentra en una situación inestable, con la presidencia vacante tras el cese de Garciandia sin el consiguiente nombramiento de un sucesor, un director dimitido que se mantiene con carácter provisional y un equipo directivo diezmado tras la renuncia de buena parte de sus integrantes.

En la actualidad el Puerto de Pasaia carece de un presidente y su director se mantiene con carácter provisional tras su dimisión