washington - El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, pidió ayer una significativa reforma del FMI que prime el impulso al sector privado y la desregulación, y del Banco Mundial (BM) para que centre el esfuerzo en países pobres y deje de prestar a países de ingresos medios como China.
“A medida que el FMI pasa al periodo tras la crisis financiera global, urgimos a la institución a estructurar sus programas de préstamo para priorizar reformas que impulsen el crecimiento económico guiado por el sector privado”, dijo Mnuchin en su declaración ante el Comité Financiero y Monetario del organismo.
Asimismo, señaló que el FMI debería ser “un ejemplo de disciplina fiscal”, algo que exigirá “decisiones difíciles” como revisar “los salarios y beneficios de sus trabajadores”.
Por su parte, mostró su recelo ante el incremento de capital planteado por el presidente del BM, Jim Yong Kim, para ampliar los recursos financieros de la primera institución de desarrollo global, con préstamos anuales por encima de los 50.000 millones de dólares.
“Más capital no es la solución cuando el capital existente no se distribuye de manera efectiva”, dijo el secretario del Tesoro, que participa en la asamblea anual de ambas instituciones que se celebra esta semana en Washington.
En este sentido, Mnuchin señaló que “la demanda de capital barato siempre superará la oferta, por lo que la clave es asegurarse que esos recursos se aplican donde son más necesitados y pueden alcanzar resultados efectivos y sostenibles”.
“Reconocemos que el BM tiene un papel que jugar entre sus clientes más ricos y solventes, pero a nuestro juicio este papel debería estar centrado en la transferencia de conocimiento, y diseñado para que salgan completamente de la asistencia de los donantes”, remarcó Mnuchin. - N.G.