madrid - Iberia y el sindicato de pilotos Sepla firmaron ayer un principio de acuerdo laboral, que ambas partes calificaron de "histórico" porque pone fin a tres décadas de conflicto y con el que confían situar a la compañía en la senda de un crecimiento "rentable y sostenible" basado en una mejora sustancial de productividad de la compañía, que permitirá reducir su base de costes -hasta en un 62% según los cálculos del colectivo- y hacerla más competitiva.
El presidente ejecutivo de Iberia, Luis Gallego, y el jefe sindical del Sepla en la aerolínea, Justo Peral, sellaron en Madrid el acuerdo, que permitirá a la compañía aérea situarse en la senda de "un crecimiento rentable y sostenible", al mismo tiempo que facilitará que Iberia Express tenga su propio desarrollo, aunque limitado.
Para el jefe sindical del Sepla en Iberia, el acuerdo supone "una mejora sustancial" de la productividad de Iberia, ya que la sitúa al nivel de otras compañías con las que compite como Ryanair o EasyJet. - E.P.