La Hacienda de Gipuzkoa actualiza las tablas de retención para el año que viene en el IRPF
Aplicará la deflactación de tarifa prevista en la próxima reforma del impuesto A partir del 1 de enero dejará de existir la deducción de 400 euros que se mantenía para las rentas más bajas
Donostia. La Hacienda Foral de Gipuzkoa ha presentado el proyecto de decreto foral por el que se aprobarán las nuevas tablas de retenciones a aplicar durante el año que viene a los rendimientos de trabajo en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
La actualización de la tabla de retenciones sigue la línea de la deflactación de la escala de gravamen de la base liquidable general y la actualización de la cuantía de la deducción por descendientes que se recogen en el proyecto de norma foral que la Diputación liderada por Bildu ha presentado con el fin de reformar parcialmente el IRPF de cara a la "recuperación de la equidad".
Asimismo, la nueva tabla está marcada también por la eliminación de la deducción para incentivar la actividad económica, la deducción de 400 euros que se ha mantenido vigente durante el pasado año y el presente, pero que desde el 1 de enero de 2012 dejará de existir.
Durante el presente ejercicio el territorio foral sigue permitiendo que los contribuyentes con una base imponible igual o inferior a 15.000 euros apliquen una deducción de 400 euros anuales, mientras que los contribuyentes con una base imponible situada entre 15.000 y 20.000 euros pueden disfrutar de una deducción anual de 400 euros menos el resultado de multiplicar por 0,08 la cuantía resultante de minorar la base imponible en 15.000 euros. Sin embargo, a partir del ejercicio 2012 esa ventaja fiscal desaparecerá definitivamente.
En el decreto foral presentado, el departamento de Hacienda y Finanzas dirigido por la diputada Helena Franco ha modificado los tramos de los rendimientos en la tabla, reduciendo a 11.560 euros el mínimo por el que se aplica la retención a contribuyente sin descendientes, al pasar de 12.130 euros a 11.560 euros (una diferencia del 4,7%).
Es decir, si antes a una persona cuyas rentas de trabajo anuales eran inferiores a 12.130 euros no se le aplicaba retención, ahora se realizará a partir de 11.560 euros de renta. En cuanto al tramo marginal, la cifra máxima por la que aplica la retención más elevada (del 40%) pasa de los anteriores 227.900,01 euros, a 235.010,01, lo que representa una variación del 3,1%.
La mayor parte de cambios realizados por el decreto foral de Hacienda en los porcentajes de la tabla (aparecen resaltados en el gráfico adjunto) se concentran en los rendimientos situados entre los 17.000 y los 41.000 euros anuales y entre los contribuyentes con familia numerosa, reduciéndose las retenciones en los casos en que las rentas son de tipo medio, y elevándose en las que se refieren a rentas elevadas.