Donostia. Comienza una nueva etapa para las antiguas plantas azpeitiarras de Marcial Ucín, Corrugados Azpeitia y Corrugados Lasao, que ya son propiedad del gigante siderúrgico brasileño CSN. La operación de venta se cerró ayer mismo, según informó pasadas las 19.30 horas el Grupo Gallardo, que percibirá un total de 970 millones de euros por el traspaso de cuatro fábricas, la cementera extremeña Balboa, la siderurgia alemana Thüringen y las dos plantas de Corrugados. La operación queda sujeta únicamente a la preceptiva aprobación por parte de las autoridades de competencia europeas.
La entrada del grupo brasileño se esperaba en Azpeitia con una mezcla de incertidumbre por los posibles ajustes de plantilla -actualmente trabajan allí 495 empleados- que en ocasiones se producen en operaciones de este tipo y de esperanza por lo que supone de impulso en un momento de crisis de la construcción, sector para el cual producen las dos plantas guipuzcoanas. CSN, junto con Sidenor, es uno de los grandes grupos siderúrgicos de Sudamérica y su entrada en Corrugados supone cierta garantía de trabajo para el mercado brasileño, donde la construcción se encuentra en expansión.
Tal y como avanzaba NOTICIAS DE GIPUZKOA en su edición del pasado día 12, la operación de venta estaba pendiente de unos "flecos"; entre ellos, la venta de la siderurgia alemana Thüringen, ubicada en la localidad de Unterwellenborn. Lo que hace unas semanas se iba a traducir en una participación de CSN en esta empresa ha derivado en una compra por el 100% de la compañía.
Grupo Gallardo y CSN anunciaron a mediados de diciembre la venta de Corrugados Azpeitia, Corrugados Lasao y la cementera Balboa por unos 382 millones de euros. Las negociaciones finalmente se han alargado más de lo previsto -se esperaba cerrar la operación para marzo- por la inclusión en la venta de la fábrica alemana. Esta demora había generado mucha incertidumbre en la plantilla, cuyo comité denunció la semana pasada falta de información por parte de la empresa respecto al proceso. De hecho, miembros del comité de empresa conocieron ayer la noticia de la venta cuando recibieron la llamada de este periódico.
Esta operación, según explicó a NOTICIAS DE GIPUZKOA el consejero delegado de Grupo Gallardo, Juan Sillero, "sanea y fortalece al grupo y le permite tener solidez financiera para acometer nuevas inversiones". BBVA y Mediobanca han actuado como asesores financieros y Cuatrecasas Goncalves Pereira como asesor legal del Grupo Gallardo.
El fortalecimiento financiero de Alfonso Gallardo tras esta operación, a su vez, permite que el grupo extremeño "siga "potenciando el desarrollo de sus distintas áreas de actividad", entre las que se encuentra el papelero. Gallardo es dueño desde finales de 2007 de la papelera de Errenteria Papresa, donde "estará por muchos años", según afirmó ayer Sillero a este diario.
En el primer cuatrimestre de 2011, el volumen de facturación del Grupo Alfonso Gallardo superó los 640 millones de euros, un 25% más que en el mismo periodo de 2010.