En 2020 se aprobó la Orden Ministerial ICT/155/2020, por las que los contadores de agua fría y caliente deberán ser sustituidos en el Estado en un plazo de cinco años. Si aún no ha sustituido su contador de agua y este tiene más de 12 años, está en riesgo de recibir una sanción de 5.000 euros. Esta normativa, que marcó un plazo de cinco años para completar el proceso, llega ahora a su fecha límite: agosto de 2025. El objetivo es garantizar una medición precisa del consumo de agua y fomentar el uso responsable de este recurso esencial.

Por qué es obligatorio cambiarlo 

El contador de agua es un dispositivo que se instala en las viviendas para controlar el volumen real del consumo por hogar. De acuerdo con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la vida útil de los contadores es de 12 años, prorrogables en periodos de 5 años, si se cumplen con los requisitos de verificación validados por el órgano autorizado. Esta medida, ya aplicada en otros países de Europa, favorece un mejor control del consumo, permitiendo detectar posibles fallas y a su vez contribuye a un mayor ahorro económico en los hogares.

Quién debe cambiar el contador

La responsabilidad cae en quién sea el titular del suministro. En la mayoría de ciudades, el contador pertenece a la empresa concesionaria o al ayuntamiento. Si este es el caso, entonces, se gestionará de forma gratuita la sustitución. No obstante, en comunidades de propietarios existe un único contador general de entrada, que la empresa suministradora lo cambiará cuando corresponda y, por lo general, los vecinos deberán asumir el coste.

Si no se hace a tiempo

No cumplir esta obligación puede suponer una multa económica de hasta 5.000 euros, según lo dispuesto en la Ley. Además de la sanción, el usuario podría enfrentarse a facturaciones inexactas, conflictos en la comunidad de vecinos y pérdida de derechos ante reclamaciones por consumos erróneos.

Ventaja de instalar un contador digital

El contador digital inteligente aporta una mejor lectura y evita errores de facturación. Se puede tener acceso al consumo en tiempo real en cualquier momento desde una aplicación, así como conocer alguna anomalía o fuga. Además, no requiere obra porque el proceso de sustitución es rápido y sencillo, y puede ser realizado por cualquier profesional autorizado.  

Es mejor cambiarlo ahora

Recuerde que el cambio del contador no solo es una obligación legal, sino también una oportunidad para mejorar el consumo y así ahorrar en la factura del agua. La sustitución del contador es una acción sencilla y con la fecha a la vuelta de la esquina, el tiempo apremia para evitar sanciones.