En episodios de tormenta, vendavales y similares no resulta infrecuente que se tengan que talar árboles dañados, que se han caído o que presentan riesgo de precipitarse en la vía pública.
En otras ocasiones, se debe proceder a la tala de ejemplares cuando su situación hace vaticinar riesgo de caída, sobre todo en zonas muy transitadas.
A este proceder responde la tala preventiva de dos tilos realizada ayer en la Plaza Gipuzkoa de Donostia, intervención que se enmarca en el proyecto municipal de control del arbolado urbano.
Las decisiones sobre cómo proceder en estos casos se adoptan tras la realización de las inspecciones periódicas del área de Mantenimiento Urbano, que han detectado que “uno de los ejemplares presentaba una rotura de media copa que comprometía su estabilidad y no ofrecía garantías a medio plazo”.
El segundo tilo que se va a talar “mostraba un defecto estructural en la base que, tras ser testificado, se confirmo como un riesgo para su integridad”.
La plaza Gipuzkoa es una zona sensible con mucho tránsito de personas, como lo son los parques, los centros escolares, las paradas de autobús y otras zonas de alta afluencia peatonal, en las que el control del estado del arbolado es mayor.
En base a un protocolo
El Ayuntamiento ha recordado que este tipo de actuaciones “no son puntuales”. Antes de plantearlas, se aplica un protocolo técnico “que evalúa tanto el estado del árbol como su ubicación, valorando el riesgo en su conjunto”.
El concejal de Mantenimiento Urbano, Carlos García, ha destacado que el objetivo de este tipo de intervenciones no es otro que “garantizar la seguridad de la ciudadanía sin perder de vista la conservación del patrimonio verde de la ciudad”.
García, además, ha señalado que a la hora de adoptar cualquier decisión sobre el arbolado de la ciudad se deben tomar en cuenta criterios de “responsabilidad y rigor técnico”.
“Cada intervención se basa en criterios de seguridad y en revisiones periódicas que nos permiten anticiparnos a posibles incidentes y velar por el bienestar y la seguridad de quienes transitan por nuestras calles”, ha garantizado el edil de Mantenimiento Urbano.
Por último, el concejal socialista ha subrayado que “cuidar el arbolado es también proteger a los propios árboles, garantizando que crezcan en condiciones adecuadas y que no sufran deterioros que puedan poner en riesgo su entorno.”
Tomando en cuenta estas premisas se han llevado a cabo talas diversas en otros puntos de la ciudad, como las efectuadas en la Avenida de Tolosa, donde los tilos presentan numerosos problemas que han motivado su caída en situaciones puntuales.