La concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de Donostia, Nekane Arzallus, ha subrayado hoy en la Comisión de Desarrollo y Planificación del Territorio que las obras que se están llevan a cabo en villa María del Carmen, situada en el número 21 de la Calzada Vieja de Ategorrieta, se ajustan a la normativa, según lo ha certificado “el arquitecto municipal especialista en el PEPPUC”.

Arzallus ha asegurado que las actuaciones realizadas corresponden a la licencia concedida a tal fin y son acordes a la “preservación de los valores arquitectónicos del edificio”.

La edil de Urbanismo ha explicado que tras tener conocimiento de que la Fiscalía de Gipuzkoa había observado indicios de delito “sobre la ordenación del territorio y urbanismo”, además de “delito sobre el patrimonio histórico”, desde el Consistorio se dio orden de cursar visita a las obras, con el resultado antes citado.

Respuesta en comisión

“Estamos atentos a los que diga la Fiscalía, pero contamos con el informe positivo del arquitecto municipal”, ha insistido Arzallus a preguntas formuladas por EH Bildu y el PP.

“Donde uno ve blanco otro ve negro. La Ertzainza, que actuó como Policía Judicial por orden de la Fiscalía, observó que las viviendas construidas están en contacto con la fachada sur, aunque la normativa permite esta actuación en contacto con la fachada norte. Esto es algo objetivo”, ha asegurado el concejal de EH Bildu, Ricardo Burutaran, que también ha afirmado que no se respeta la distancia “de retiro” debida, “ya que el balcón del edificio se apoya en el muro de sujeción del número 17”.

“Seguimos siendo respetuosos con los edificios protegidos por el PEPPUC y el informe del arquitecto dice lo que dice”, ha reiterado Arzallus,  

Denuncia de Ancora

El decreto de la Fiscalía de Gipuzkoa responde a una denuncia presentada por la Asociación para la Defensa del Patrimonio, Ancora, “contra aquellas autoridades o funcionarios públicos que, a sabiendas de su injusticia, informaron favorablemente y concedieron licencia para derribar elementos protegidos en Villa María del Carmen”.

El edificio, argumentó la asociación, está protegido en grado D en el Plan Especial de Protección del Patrimonio, PEPPUC, lo que, señaló, obligaría a preservar “la totalidad de las partes exteriores del edificio, incluyendo la escalinata que daba acceso al porche y la ampliación proyectada en 1946 por Florentino Mocoroa”.

Tras la inspección de la Ertzaintza, según informó Ancora, se constató la eliminación de diversos elementos protegidos, además de la construcción de las cuatro viviendas en contacto con la fachada norte.