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COMPETICIÓN ENTRE PROFESIONALES

Dos platas en tiro con arco para la Guardia Municipal de Donostia

El agente Andoni Larrabeiti se trae de Alicante dos segundos puestos en categorías de veteranos dentro de los Juegos Europeos de Policías y Bomberos

Dos platas en tiro con arco para la Guardia Municipal de Donostia

El guardia municipal donostiarra Andoni Larrabeiti, destinado en la actualidad en el departamento de Recursos Materiales del cuerpo policial tras haber trabajado largos años en el control de la Casa Consistorial y otro destinos, ha logrado dos medallas de plata de tiro con arco, en categorías de mayores de 50 años, en la última edición de los Juegos Europeos de Policías y Bomberos. El policía donostiarra concursó en tres categorías.

La competición celebrada en Alicante es un especie de olimpiada específica para los profesionales de la seguridad y emergencias, en la que han tomado parte este año unos 3.000 agentes de 40 nacionalidades en medio centenar de disciplinas, tanto individuales como por equipos.

Larrabeiti, que siempre ha tenido que estar en forma por su condición de policía, llegó al tiro al arco casi por casualidad. “Practico desde hace 12 años, cuando mi hijo, con 14 años, quiso hacer un cursillo”, recuerda el agente, que aprovechó a su vez para probar un nuevo deporte. “La experiencia me encantó y decidir seguir. Por ello, en estos últimos 12 años he estado entrenando duro, hasta el punto de que me he llegado a sacar los títulos de entrenador de nivels 1 y 2”, explica. Ahora, además de ejercitarse él mismo, ayuda también en los entrenamientos del club Diarco de Donostia.

Desde que cogió las primeras flechas, además de entrenar, empezó a competir. Su cosecha de los últimos cinco años han sido cinco medallas en los campeonatos de España, a las que se suman ahora las dos de plata de la novena edición de los Juegos Europeos de Policías y Bomberos

Sin ir más lejos, este año ha sido campeón de España de veteranos, así como medalla de plata en la categoría de equipos mixtos con Lidia Cañete, equipo que actualmente ostenta el récord de España. El año pasado, además, también fueron campeones de España y él consiguió una medalla de plata. Cuenta también con otra presea, esta vez de bronce.

Larrabeiti no oculta su satisfacción por haber logrado dos medallas europeas en un deporte del que se enamoró en la edad adulta. “Cuando me pongo a hablar del arco se me va el tiempo. Desde que probé se ha convertido en una de mis pasiones, que me permite competir y a su vez despejar la mente y relajarme”, señala el agente. “Cuando coges la flecha y apuntas con el arco a la diana te olvidas de todo. La concentración que se consigue es altísima, lo que ayuda también en otros aspectos del día a día”, explica. 

Para poder participar en estos Juegos Europeos de Policías y Bomberos, Larrabeiti pidió permiso a la Guardia Municipal, ya que le picaba el gusanillo de tomar parte en un encuentro específico para agentes policiales y de emergencias. “Me gusta la competición y la verdad es que ha sido toda una experiencia”, recalca. 

Un momento de la competición de tiro con arco, con el agente donostiarra a la derecha.

Los juegos del pasado mes de octubre se desarrollaron en Torrevieja y distintas localidades situadas en el área de la Vega Baja de Alicante, como Santa Pola, donde le tocó competir al policía donostiarra. “La experiencia ha sido muy buena, aunque no ha tenido la repercusión ni la organización de otros deportes más conocidos y practicados como pueden ser el atletismo, la natación o el ciclismo”, dice Larrabeitia que, sin embargo, añade: “Ha sido una competición que me ha aportado mucho, porque me ha dado la oportunidad de competir con personas de otros países y de conocer a polícias y bomberos de diferentes lugares, tanto de España como de Europa”.

En su caso, las pruebas fueron muy disputadas “desde el principio hasta el final”. El vencedor fue un bombero de Rumanía, que en 2019 fue parte del equipo nacional rumano. “Tenía un gran nivel. Aún así, le planté cara hasta el final y estuve muy cerca del oro, por lo que el sabor de boca que se me ha quedado es muy bueno”, resume con satisfacción el agente donostiarra.