El Ayuntamiento de Donostia abrirá este martes una oficina de proximidad para ayudar a la tramitación de las ayudas a la rehabilitación destinadas a una docena de edificios del barrio Altza, que ascienden a 6,5 millones de euros.
La sede, situada en Roteta Goikoa 21, donde se ubicó una de las haurreskolas del barrio, atenderá los martes y jueves de 9.00 a 11.00 y de 16.00 a 18.00 horas, con el fin facilitar a las comunidades de vecinos que pidan las ayudas disponibles para la rehabilitación. El plazo para hacerlo termina a final de este mes.
En total, el Ayuntamiento seleccionó doce comunidades de vecinos, con 124 viviendas en total, para que se acojan, si lo desean, a estas inyecciones económicas destinadas a modernizar sus edificios. Se calcula que la media de las ayudas cubrirá el 70% del coste de cada actuación prevista, aunque podrá alcanzar la totalidad de la intervención.
La rehabilitación energética de fachadas y cubiertas, la sustitución de viejas calderas, la mejora de medidas contra incendios y la colocación de placas fotovoltaicas son algunas de las actuaciones subvencionables, así mejoras de accesibilidad y otras intervenciones.
El barrio de Altza es uno de los 21 de la CAV elegidos por el Ejecutivo de Gasteiz para abordar una reforma urbana, que incluye zonas de Eibar, Arrasate, Errenteria y Pasaia, además de Bilbao y Vitoria, entre otros. Estos municipios populosos suponen más de la mitad de la población de la CAV.
La inversión total prevista en el denominado Plan de Regeneración Urbana Integral de Altza trata de mejorar las condiciones residenciales, energéticas y exteriores de zonas consideradas de “alta vulnerabilidad” como áreas de Bertsolari Txirrita, Arriaga, Arrizar, Roteta, Casares y Santa Bárbara.
Los 6,5 millones de euros en ayudas a la rehabilitación de edificios residenciales en Altza forman parte de los 12 millones de euros que componen el programa, que fue anunciado el pasado mes de noviembre por responsables del Ayuntamiento y del Gobierno Vasco. De esta suma, 9,4 millones los aporta el Ejecutivo autonómico y el resto, el Ayuntamiento.
Por ello, además de las ayudas a los edificios, el Plan de Regeneración Integral de Altza reservará otros 5,9 millones de euros a otras actuaciones de reforma exterior. Por ejemplo, se aplicarán mejoras en el parque de Harria y en la zona Harria-Pikabea y se recuperarán terrenos contaminados por amianto. En determinadas zonas se renaturalizará el entorno, con plantación de arbolado, y se mejorarán regatas como en Auditz Akular. La instalación de energías renovables en los viveros de Putzueta y de sistemas urbanos de drenaje sostenibles forman también parte de las actuaciones contempladas en el plan.
El plazo de presentación de las solicitudes para lograr las subvenciones tiene una primera fase, que finaliza el 30 de junio de 2023. En este tiempo, el representante legal de la comunidad deberá presentar el escrito de solicitud para formar parte del programa de intervención de regeneración urbana contemplado en las bases de las ayudas. Después, ya no se podrán pedir estas subvenciones. Sin embargo, habrá nuevas fases para completar la tramitación.
Las comunidades que se apunten este mes deben comprometerse a presentar, antes del 29 de septiembre de 2023, la documentación objeto de la segunda fase de la tramitación: un anteproyecto con el coste de la actuación prevista, en la que se deben concretar los costes vinculados a obtener una reducción de la demanda energética, que es uno de lo objetivos del programa.
En tercera fase, con fecha tope el 30 de noviembre de 2023, las comunidades de propietarios que hayan presentado en plazo las documentaciones en las dos primeras fases, deberán formalizar la solicitud de concesión de subvención, acompañada de toda la documentación y licencia municipal de obras.
