Los últimos meses han sido decisivos para el Polo de Movilidad Inteligente y Sostenible MUBIL. Nacido al calor de la estrategia Etorkizuna Eraikiz promovida por la Diputación Foral de Gipuzkoa, el proyecto ha recibido un impulso decisivo para su consolidación mediante la incorporación de nuevas infraestructuras y proyectos de calado. 

Y es que el Polo albergará en sus 48.000 m2 una nueva sede de CIDETEC dedicada al almacenamiento de energía, un edificio destinado a la movilidad sostenible y la transición energética gestionado por TECNALIA, y promoverá un proyecto de ecodiseño de motores eléctricos en colaboración con CEIT. Son tres de los 17 centros que conforman el BRTA (Basque Research and Technology Alliance).

Todo ello supondrá una inversión conjunta superior a los 30 millones de euros, co-financiados por la Diputación y los respectivos centros. 

Asimismo, ya están en marcha las obras de la sede definitiva de MUBIL, que se ubicará en el polígono de Eskuzaitzeta, y que cuentan con un presupuesto de 14,2 millones de euros y una duración estimada de 15 meses. La nueva sede de MUBIL, que dotará al territorio de una infraestructura tecnológica “diferencial y muy avanzada” en materia de movilidad inteligente y sostenible, contará con un espacio de casi 10.000 metros cuadrados. El edificio principal tendrá 4.900 metros cuadrados, el primer laboratorio –almacenamiento de energía– 2.200 metros cuadrados, y los laboratorios segundo y tercero –Power Train y pila de combustible de Hidrógeno– un total de 2.500 metros cuadrados. 

Además, los 38.000 m2 restantes de la superficie del Polo se destinarán a la implantación de empresas y otros agentes relacionados con el desarrollo de la nueva movilidad. Este espacio, donde se ubicarán los proyectos de Cidetec, Tecnalia y Ceit, tendrá como objetivo atraer al territorio proyectos innovadores y nueva actividad económica ligada a la movilidad sostenible.

Especialización, excelencia y colaboración

Tres son los ejes fundamentales en torno a los que actúa MUBIL para alcanzar sus objetivos: especialización, excelencia y colaboración. El primer vértice, el de la especialización, busca orientar la industria ligada al transporte, la automoción y la movilidad hacia la movilidad eléctrica, conectada, compartida y autónoma; es decir, se trata de intentar explotar la oportunidad que supone la transformación del sector de la movilidad. El segundo valor, el de la excelencia, engarza con la tradición de la industria vasca, reconocida internacionalmente por sus estándares de excelencia y calidad, y algo indispensable para llegar a ser referente internacional en movilidad inteligente y sostenible. El tercer eje es el de la colaboración entre distintos agentes para generar nuevas oportunidades y contribuir a fortalecer la competitividad del sector.