Un total de 32 tamborradas, de las 33 que recorren el Centro de Donostia el día de San Sebastián, modificarán sus trayectos para adecuarse a la nueva realidad derivada de los cambios de tráfico que entraron en vigor desde el pasado verano, como primer paso dentro del plan Datorren Donostia.

Las compañías festivas del Centro, que reúnen a unas 6.000 personas en las 24 horas de la fiesta patronal, han tenido que diseñar unos nuevos recorridos, que ya han comunicado a Donostiako Festak en la página web específica para ello y que cerró el 31 de octubre el plazo para hacerlo.

Ahora es la entidad organizadora el día de San Sebastián la que tendrá que encajar los nuevos recorridos, como siempre que surge alguna nueva formación, hay obras o impedimentos para desfilar por el recorrido habitual. Este año se prevé la incorporación de tres tamborradas en El Antiguo.

Representantes de las tamborradas del Centro tomaron parte en una reunión el pasado miércoles, en la que algunos mostraron su preocupación por la situación derivada de los cambios de tráfico.

Habitualmente, las tamborradas de adultos recorren las zonas asignadas por Donostiako Festak, que siguen el mismo sentido que la circulación de vehículos para una mejor organización del tráfico alrededor de los desfiles. La inversión del sentido de circulación de las calles San Martín y Zubieta, por donde pasan la gran parte de formaciones del Centro, obliga a alterar los trayectos y algunas entidades temen que el nuevo esquema no sea tan ágil como el que lleva años practicándose.

El coordinador de las tamborradas del Centro, Chema Cibrián, explicó a este diario que la tamborrada del hogar del Jubilado Jatorra, de la calle Urbieta, mantendrá el mismo recorrido porque tanto Urbieta como Easo, las calles principales que recorre, han mantenido los mismos sentidos de la circulación.

En los demás casos no. Es posible que los nuevos recorridos fijados por cada tamborrada para adecuarse a los sentidos de circulación actuales tengan que ser modificados por Donostiako Festak. “Sabemos que algunas tamborradas van a coincidir. Por ejemplo, Mundaiz, Espai Catalunya y La Espiga, pero haremos por no estorbarnos”, dice Cibrián. 

En el Centro, a partir de las 00.00 del día de San Sebastián desfilan Ondar Gain, Corcones, Espai Catalunya, Kai Alde, Cantábrico, Mundaiz, La Espiga y Bar Antonio. 

Por la mañana, les toman el relevo Amigos de Angulas Aguinaga, Vasconia, Deusto, Kutxa, Jatorra, Hotel de Londres, AMPA Aldapeta y Emakumeen Etxea. Por la noche, los tambores suenan a manos de Eiztari, Eskaut, Amigos del Europa, Txubillo, Gaztedi, Anastasio, Eskola, Ingenieriak, Aldapela, Gizartea, Lagun Artean, Atlético y Catedral-Centenario.

Habitualmente, las tamborradas que animan una de las calles principales de Donostia dejan un carril para el paso de autobuses, que también aprovechan los pocos coches que circulan el día de San Sebastián. Cuando la calle es estrecha, sin embargo, la circulación tiene que esperar a que termine de pasar la tamborrada. Esto sucederá en las calles Arrasate y en Zubieta, por ejemplo.

Calles peatonales

En el Centro, la existencia de vías peatonales ha favorecido que las distintas agrupaciones las aprovechen para desfilar sin incomodidades ni tener que tener cuidado con el tráfico de autobuses y coches.

A pesar de que los cambios de itinerarios suponen un trastorno para la organización, los participantes en las distintas compañías del Centro, así como del resto de la ciudad, están ya ilusionados con la festividad del 20 de enero, que no ha contado con los tradicionales desfiles de soldados, cocineros y aguadoras en los últimos dos años a causa de la pandemia.

En 2023, habrá 155 formaciones festivas que recorrerán todos los barrios de la ciudad, con cerca de 20.000 participantes, más del 25% de los cuales corresponden a las tamborradas del Centro.