Una docena de aulas de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) tendrán la oportunidad de aprender a circular con sus bicicletas de modo correcto con el fin de aprender a usar este medio de transporte para acercarse al centro escolar y ser capaces de hacerlo con seguridad. La iniciativa de fomento de las bicicletas se une a otras, como las clases de mecánica básica que imparten estudiantes del Politécnico Easo a alumnos de instituto.

La iniciativa para aprender a circular minimizando riesgos se estrenará este curso en Donostia con un programa piloto, pero en ciudades como Vitoria lleva ya un tiempo en marcha. En concreto, en la capital alavesa comenzaron hace seis años con la iniciativa y, desde entonces, unas 70 aulas pasan cada año por estas lecciones específicas para que chavales de la ESO cojan práctica y habilidad circulando en bicicleta.

Dani Ruiz, de la empresa Txita, que se encargará de ofrecer las sesiones de este programa piloto en Donostia, explica que la idea es “que los estudiantes puedan ir a clase en bicicleta por los bidegorris y las zonas 30 y aprender lo básico para usar este vehículo, que muchas veces sacan dos veces al año de casa”. En breve, el departamento de Movilidad del Ayuntamiento enviará una comunicación a los centros escolares que tengan ciclo de ESO y las primeras doce aulas que se apunten serán las que tengan derecho a esta formación gratuita.

El curso de formación ciclista utiliza una metodología ya practicada en distintos países europeos, denominada Bikeability, que incluye distintas maniobras y situaciones que todo ciclista se puede encontrar en un desplazamiento. Desde 2015, más de 56.000 estudiantes de la península han pasado por estas sesiones.

Los estudiantes de ESO, de 13 y 14 años principalmente, tendrán una primera clase teórica en el propio centro escolar. Después, recibirán una segunda sesión práctica, de dos horas, en el patio del centro, que terminará con una evaluación individial para concretar si cada estudiante tiene las capacidades mínimas, principalmente de seguridad, para poder circular en bicicleta por la calle. La tercera sesión también será práctica y consistirá en transitar en bicicleta por los alrededores del centro escolar, de modo que los alumnos se acostumbren a ir no solo por los bidegorris sino, también, por la carretera.

En las clases de formación ciclista, cada alumno llevará su propia bicicleta aunque, si alguno carece de ella, se le prestará una. No obstante, la idea es que cada estudiante conozca su propio vehículo y así pueda también ponerlo a punto en los aspectos más básicos para utilizarlo.