Fuera del programa. Las fiestas se viven de muchas maneras y también en pareja. Incluso, algunos que empiezan las fiestas en solitario, las terminan enamorados. Aunque el ligue y el conocer a nuevas personas no forma parte de los programas oficiales de la Aste Nagusia, quien más quien menos sabe que el que no tiene media naranja tiene más posibilidades de encontrarla que un miércoles de febrero. Después, a enlazarse de la cintura y a vivir la fiesta.