El palacio de congresos y actos culturales Kursaal apagará su luz exterior a las 22.00 horas, como marca el decreto del Gobierno de España, a partir del próximo martes. Así lo explicaron a este medio portavoces del complejo, una infraestructura dependiente al 50% del Ayuntamiento de Donostia y la Diputación de Gipuzkoa, que recalcaron que la habitual iluminación que emiten las fachadas principales del edificio de Moneo se cortará a la hora obligada excepto cuando haya aún espectáculos o actividades congresuales en el interior. El complejo de la Zurriola también cumplirá las nuevas normativas respecto a la climatización.
El Kursaal, además de ser un espacio para festivales y reuniones, se ha convertido en uno de los símbolos de la capital guipuzcoana, y es el primero de Donostia que ha decidido cómo cumplir el decreto del Gobierno central de ahorro energético. Además, también ha sido protagonista de actividades culturales.
Estos días, por ejemplo, hay actuaciones de la Quincena Musical más allá de las 22.00 horas. Si así sucede a partir del próximo martes, la iluminación de las fachadas finalizará en cuanto terminen los eventos. Lo mismo sucederá cuando se desarrolle el Zinemaldia, en septiembre, y, en cualquier caso, cuando haya actividad en el interior.
En la actualidad, el Kursaal está iluminado hasta las 12.00 horas los días laborables y hasta las 2.00 horas los festivos. En invierno, sin embargo, las luces de las fachadas se apagan a las 11.00 y a la una de la madrugada, respectivamente.
A lo largo del pasado año, el Kursaal gastó más de 236.400 euros en el pago de los distintos suministros de gas, agua, telefonía y, sobre todo, electricidad.
El edificio cultural es uno de los que suele sumarse al tradicional apagón contra el clima, una acción de carácter simbólico que, a partir de martes, será una realidad práctica cada noche.
Aunque el edificio de Moneo ya ha cumplido más de dos décadas no fue hasta unos años después cuando la fachada que da al río comenzó a ser utilizada también como pantalla publicitaria relacionada con los congresos que se celebran en el interior. Además, el edificio ha ofrecido distintas decoraciones con motivo de fechas señaladas, como Carnavales, San Sebastián y otras.
En los primeros tiempos, los cuadrados creados por las vigas del Kursaal, un total de 72 en la fachada del río, actuaban como píxeles gigantes con un total de 1.400 fluorescentes. Posteriormente, fue cambiando la tecnología de iluminación.
Por otra parte, el Ayuntamiento estudia por el momento qué hará con sus propios edificios representativos, como el antiguo Casino de Alderdi Eder, sede municipal, o el teatro Victoria Eugenia, entre otros.
En el caso de la iluminación navideña, que este año se prevé que sea especial ya que Donostia será capital europea de la Navidad junto con Génova, el Ayuntamiento también analiza la situación. "Habrá que estudiar y valorar las diferentes posibilidades para adecuarnos a la nueva situación de ahorro energético y hacer compatible una atractiva iluminación navideña con la sostenibilidad y la eficiencia energética", señaló a este diario la concejala de Impulso Económico y Ecología, Marisol Garmendia.
Otra ciudad en la que la iluminación navideña sirve de imán para las compras en Vigo, que precisamente inició la colocación de los arcos luminosos el pasado martes. En este caso, la ciudad gallega ha optado por reducir el tiempo de iluminación y en lugar de ser de 18.00 a 1.00 de la madrugada, será de 18.30 a 12.30 horas, según anunció
