donostia - Las zonas cercanas al polideportivo de Altza en las que se ha detectado amianto estarán cubiertas por unas lonas especiales hacia Semana Santa, según informaron ayer fuentes del departamento de Urbanismo del Ayuntamiento de Donostia, que mantuvieron una reunión con responsables del Instituto de Salud Laboral, Osalan, con el fin de determinar cómo se llevará a cabo esta actuación.
La colocación de vallas alrededor de los dos terrenos de Altza en cuyos subsuelo, y algunas zonas superficiales, se detectó la presencia de amianto se llevó a cabo poco después de los estudios que aconsejaron esta actuación, presentados en noviembre. Sin embargo, no ha sucedido lo mismo con la instalación de la lona especial sobre las zonas verdes afectadas, que solicitaban los mismos trabajos como medida de precaución. Fuentes municipales aseguran que el Ayuntamiento está dispuesto a instalar estas lonas especiales, pero necesita la autorización de Osalan que, a su vez, quiere tener garantizada la seguridad de los operarios que vayan a colocar las citadas protecciones.
En concreto, el trabajo que llevó a cabo la empresa Asmatu por encargo del Ayuntamiento sugirió prohibir el acceso de peatones y público en general a dos zonas (la campa trasera de Tomasene y la parcela del parking y zona verde de Darieta), lo que se hizo con la colocación de sendos vallados. Estas verjas, sin embargo, fueron abiertas recientemente por vecinos de la zona con el fin de usar un viejo camino que lleva a unas huertas y que ha quedado dentro del perímetro de protección.
Tras conocerse la apertura de huecos en las vallas, el Consistorio las cerró de nuevo el pasado viernes y colocó carteles prohibiendo el paso y advirtiendo de la imposición de multas a quienes incumplan la orden, además de aumentar la vigilancia en la zona por parte de la Guardia Municipal.
vertedero incontrolado Las lonas que serán colocadas antes de Semana Santa, según el calendario previsto, afectarán a las zonas correspondientes al depósito incontrolado de amianto que existió junto a la fábrica Fibrocementos Vascos, en cuyo solar se construyó posteriormente el polipodetivo recientemente demolido para la ejecución del nuevo complejo deportivo para el barrio.
El estudio recomendó incorporar una lámina de polietileno de alta densidad, de un milímetro de grosor y resistencia a la rotura y el desgarro. El objeto de la lámina es servir de barrera a la difusión potencial de fibras de amianto hacia el exterior. El trabajo también aconsejó poner una geomalla inferior para evitar el deslizamiento de la lona de polietileno.
Además de estas propuestas, Asmatu sugirió también la conveniencia de hacer un seguimiento de las mediciones en el ambiente exterior, ya que, aunque en las realizadas en octubre resultaron negativas, los expertos creen conveniente llevar a cabo nuevas pruebas en condiciones de viento y humedad inferior, más propicias para que las fibras de amianto se propaguen.
La situación generada en torno a las obras del nuevo polideportivo de Altza, condicionadas por la aparición de amianto en parcelas cercanas, ha provocado inquietud entre la vecindad del barrio. Recientemente, una nueva plataforma de ciudadanos ha convocado una reunión para el miércoles 22 a las 19.00 horas en el salón de actos de Tomasene. La plataforma ha informado en un comunicado de que desea que acuda al encuentro el alcalde de la ciudad, Eneko Goia, junto a responsables técnicos y políticos, para que ofrezcan explicaciones sobre “plazos de obras, futuro de los terrenos y peligros o no existentes para la población”. No obstante, el comunicado no confirma la presencia de los responsables municipales en la reunión.
La plataforma, además, quiere que el Ayuntamiento se comprometa a que los usuarios que se han dado de baja en el viejo polideportivo, tras su derribo, tengan el derecho a reactivar sus Kirol Txartela sin coste adicional cuando se abran las nuevas instalaciones.