donostia - El consumo doméstico de agua sigue descendiendo en Donostia. El año pasado, se consumieron 139 litros por habitante, dos menos que el año anterior. Mientras, el consumo total (incluyendo el industrial) se mantiene estable en los 211 litros por día y por habitante, 135 litros menos que en 2003. El informe de sostenibilidad elaborado por la Fundación Cristina Enea achaca el descenso a las mejoras en la red de distribución (renovación de tuberías, supresión de fugas...), además de a la concienciación ciudadana. También la situación de crisis de los últimos años ha podido influir en el descenso del consumo.
Si bien el consumo doméstico ha ido disminuyendo en los últimos años, en 2015 representó el 66?% del consumo total de agua, una proporción que ha ido incrementándose en los últimos años (en 2007 supuso el 50?%).
El informe de Cristina Enea mide también la calidad biológica del agua del Urumea a su paso por la ciudad, que en 2015 presentó unos resultados ligeramente peores que los de 2014, aunque siguen siendo muy positivos. Se hacen mediciones en cuatro puntos del río: en Ergobia el valor obtenido es algo inferior al de años anteriores, por lo que se valoran como aguas de buena calidad en lugar de alta calidad. El informe constata que este tramo del río Urumea se encuentra afectado por algunos vertidos directos. En el estuario se mide la calidad del agua en Loiola, donde la situación de partida era peor y hay una mejoría para pasar de un potencial deficiente a uno moderado; y en Santa Catalina, donde el potencial sigue siendo máximo, a pesar de empeorar ligeramente. Por último, en la costa se mide la calidad del agua en Mompás, donde se logra un 0,82 sobre uno, es decir, que la calidad sigue siendo muy buena, aunque el valor ha bajado trece décimas desde el año pasado. - A.Z.