El control de la población de ratas en Donostia es constante aunque, en ocasiones, distintos puntos de la ciudad sufren una mayor presencia de estos animales. Para evitarlo, el Consistorio llevó a cabo el pasado año la geolocalización de los avisos, que son entre uno y dos de media cada día. En total, se geolocalizaron las llamadas recibidas para determinar la prevalencia de los roedores así como su ubicación en el momento del aviso. De este modo, el Ayuntamiento puede identificar los factores que contribuyen a que haya una mayor presencia de roedores en algunos lugares y momentos concretos. Así, además, puede proponer medidas correctoras para evitar la proliferación de los roedores. Por ejemplo, la comida que dejan algunas personas para gatos y palomas -algo que está prohibido- suele resultar también muy atractiva para las ratas que, además, se dejan ver con más frecuencia en momentos de calor y cuando se producen derribos en algún edificio. Las bolsas de basura que se quedan fuera de los contenedores también ejercen de imán para estos animales.
A lo largo del pasado año, el departamento de Sanidad del Ayuntamiento de Donostia analizó los datos de 620 avisos de ratas, además de llevar a cabo tres campañas de desratización extraordinarias, que se unieron a las que tienen lugar de modo continuo.
Una empresa especializada, con seis operarios, lleva a cabo cada día un control por zonas. Aunque cada día siguen un itinerario, también actúan en función de las llamadas recibidas y suelen hacerlo en un plazo máximo de dos días. El coste de este servicio supone cerca de 55.000 euros a las arcas municipales.
Recientemente, la plaza de Pío XII sufrió una campaña especial de desratización, ya que se había detectado una presencia mayor de la habitual de estos roedores.
PLAGAS Multiplicación
Chinches
Pero las ratas no son la única plaga que aqueja a la capital guipuzcoana, según la memoria de actuación del departamento municipal de Sanidad. Los chinches son insectos cuya presencia ha ido creciendo en los últimos años y que provocaron el pasado año una treintena de actuaciones en viviendas de la ciudad. En los últimos tiempos, se ha notado un crecimiento de esta plaga, también en algunos establecimientos hoteleros, que ha llevado a registrar entre cuatro y cinco denuncias a la semana, una cifra nunca alcanzada en Donostia hasta el pasado año.
Además de estos insectos, las avispas asiáticas también dan un trabajo considerable a los servicios municipales. El pasado año se retiraron 222 nidos con la ayuda de bomberos, ciudadanos y apicultores. Además, se colocaron un total de 39 trampas con la colaboración de los bomberos.