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La Agrupación Cívica Áncora aplaude el aumento de protección para el Bellas Artes

a pesar de ello, reclama que el edificio sEA CONVERTIDO EN BIEN CULTURAL El Ararteko pide al Gobierno Vasco que abra un expediente para dotarlo de la máxima conservación

La Agrupación Cívica Áncora aplaude el aumento de protección para el Bellas Artesng

Donostia. La Agrupación Cívica Áncora consideró en un comunicado "positivo" el aumento de grado de protección otorgado por el Gobierno municipal a Bellas Artes en el Plan Especial de Patrimonio Urbano Construido (Peppuc), que aprobó el pasado viernes. A pesar de ello, sostiene que el paso de grado a D a C, que impide derribar sus fachadas, no es suficiente y propone una mayor protección, en concreto la del grado B. "El Grado C afecta a algunos elementos de su envolvente exterior, pero no protege el edificio en su integridad ya que queda supeditado a ordenanzas particulares", considera la asociación, que recuerda que el Centro de Patrimonio Cultural Vasco aconsejó el pasado mes de junio 2013 que se englobase en el grado B.

Por otra parte, Áncora recuerda que el pasado mes de abril solicitó al Gobierno Vasco la declaración de Bien Cultural de Euskadi con categoría de monumento para el edificio y que, "ante la lentitud de la administración", se dirigió al Ararteko, quien ha dictado una resolución dirigida al Gobierno Vasco en la que le pide que abra el correspondiente expediente de calificación de Bien de Interés Cultural para el Bellas Artes por ser este "portador de valores culturales suficientes como para formar parte del patrimonio cultural vasco". Esta petición, según asegura Áncora, "implicaría el paso inmediato del Bellas Artes al Grado A del Peppuc municipal, salvaguardando un edificio fundamental en la historia e imagen urbana de San Sebastián".

El Peppuc, aprobado por el Gobierno de Bildu, será elevado al Pleno de Donostia, donde los grupos políticos podrán enmendar el grado de protección de este y otros edificios. Además, los técnicos municipales estudian estos días la petición de la propietaria del inmueble, la Sade, que ha solicitado la ruina del mismo por su deterioro. En los últimos días ha sido envuelto con una malla para evitar que caigan fragmentos de fachada.