Donostia. La concejala de Infraesctructuras y Servicios, Nora Galparsoro, anunció ayer que ha presentado a la Diputación, así como a los vecinos de Amara, un proyecto provisional para minimizar las molestias que provoca el vial de Carlos I. "Consiste en la utilización de un solo carril de salida para el tráfico en gran parte del vial", explicó la corporativa, que añadió que, de este modo, se crearía un paso semaforizado en la superficie para evitar que los vecinos tengan que utilizar el pasadizo subterráneo, una de sus reclamaciones.
Galparsoro señaló, en una nota informativa, que "buscar una alternativa a este paso es una de las reivindicaciones de los vecinos" y añadió que el Ayuntamiento tiene "un compromiso firme con la mejora del entorno".
Por otra parte, añadió que la supresión del vial de Carlos I, que la Diputación considera "no prioritaria" en la actualidad, sí lo es para el Gobierno municipal. "La intervención es prioritaria , ya que los vecinos llevan muchos años soportando las consecuencias de esta infrastructura, además de ser una operación fundamental para mejorar el ordenamiento del tráfico en la ciudad", agregó la responsable del Ejecutivo de Bildu.
prioridades Asimismo, la corporativa añadió que su gobierno "está haciendo todo lo posible para que la Diputación priorice entre sus actuaciones la eliminacion de este vial". Además, explicó que se ha trabajado en una solución más económica que permita la reforma de la rotonda de Martutene, así como la creación de un nuevo acceso por Marrutxipi, que permita evitar el colapso viario cuando llegue el momento de cerrar Carlos I.
La concejala de Infraesctructuras y Servicios añadió que, una vez planteada la solición técnica, ha pedido al ente foral "compromisos firmes con fechas y acciones" para la supresión del enlace viario de Carlos I.
El pasado 5 de octubre, este vial de Amara fue escenario de una primera movilización de vecinos para reclamar el derribo del enlace y el cumplimiento de los compromisos anunciados por las instituciones públicas, especialmente de la Diputación. Cerca de 300 personas acudieron a la concentración convocada por la Comisión pro Derribo de Carlos I y se colocaron de modo intermitente en la carretera, cuando el semáforo estaba en rojo para los vehículos, equipados con pancartas, letreros y megáfonos.
Así, los vecinos del barrio de Amara protestaron por la decisión de retrasar las obras necesarias para derribar el viaducto de Carlos I y criticaron a los responsables del Ayuntamiento de Donostia por no estar de su lado en estos momentos.