Donostia. El 50º Concurso Internacional de Fuegos Artificiales que se ha celebrado esta pasada Aste Nagusia se vio ayer por sorpresa envuelto en una agria polémica después de que la firma valenciana Ricasa, propiedad de Ricardo Caballer padre, anunciara su decisión de "dejar de participar" en el certamen al considerar que el Jurado Oficial "regaló" la Concha de Oro a la empresa Pirofantasía, también valenciana y de otro miembro de la saga Caballer. A juicio de Ricasa, la colección ganadora incumplió las bases del concurso al "disparar paracaídas", un tipo de cohete no permitido y, pese a ello, se le otorgó el galardón de forma "indebida e injustificada".
La respuesta por parte los organizadores del certamen no tardó en llegar y, a través de un comunicado, manifestaron su "malestar" con la forma de proceder de Ricasa al "poner públicamente en entredicho a los miembros del jurado, en lugar de haber procedido legalmente si, como indican, consideraban algún extremo del concurso irregular".
A continuación, los responsables de Donostia Kultura defendieron la "innegable" trayectoria y conocimiento de los miembros del jurado, entre los que, según destacaron, se encontraba el diseñador de colecciones y miembro del Jurado del Concurso de Shangai, Yves Relave.
La denuncia y despedida de la firma Ricasa, una de las participantes más veteranas en el Concurso de Fuegos Artificiales, ha sorprendido a todos, ya que el propio Caballer, premiado en esta edición con la Concha de Plata, estuvo presente el sábado en el acto público en el que se dio a conocer el palmarés del concurso y lejos de mostrar ningún desacuerdo se fundió en un abrazo con el primer clasificado posando juntos en la habitual foto de familia.
El martes, tras el correspondiente recuento de votos, se dio a conocer el Premio del Jurado Popular, que recayó precisamente en la firma Ricasa, que también se había llevado el Premio de la Juventud.
Apenas 24 horas después, el conocido Ricardo Caballer emitió un comunicado, en el que además de agradecer al jurado joven su reconocimiento y al público donostiarra su apoyo, cuestionaba abiertamente la decisión del Jurado Oficial.
"El jurado, que dice ser entendido, por lo visto no se lee ni las bases en las que se prohibe disparar paracaídas, también conocidos como guirnaldas o globos", afirma Ricasa en su nota, en la que añade que "el jurado debería haber descalificado" a Pirofantasía, "como hicieron con Ricasa en el concurso de 1999".
Los organizadores del certamen explicaron ayer que en la colección del día 13, lanzada por la ganadora Pirofantasía, el Jurado observó, durante la traca final, "un efecto que parecía utilizar paracaída". Sin embargo, tras "estudiar detalladamente dicho efecto, entre otros medios mediante la grabación del disparo", se comprobó -aseguraron- que "no se trataba de un efecto de gran deriva, sino de un oscilante rojo, con una duración inferior a doce segundos", cuando los paracaídas suelen durar un minuto. El Jurado decidió "por unanimidad" no descalificar a Pirofantasía, otorgándole finalmente la Concha de Oro.
La nueva normativa Este año las pirotecnias participantes en el Concurso Internacional de Fuegos Artificiales de Donostia tuvieron que esmerarse más, ser más imaginativas y más creativas, ya que la nueva normativa que regula este tipo de espectáculos y que entró en vigor en junio, ha reducido la potencia de los cohetes que se pueden disparar. En este sentido, se tomaron algunas medidas, como ampliar el perímetro de seguridad, pero las colecciones siguieron luciendo como otros años.
Esta nueva regulación no parece que tuviera nada que ver con la polémica desatada. Ricasa insistió en que se debió descalificar a la ganadora y consideró que este tipo de actuaciones por parte del Jurado solo contribuirá a que no participen pirotecnias de prestigio en el concurso y los donostiarras "solo puedan ver espectáculos mediocres".
Por su parte, los responsables del certamen no dudaron en "lamentar" la decisión de Ricasa de no volver a participar en el certamen, ya que ha sido una de las firmas que ha dado "prestigio" al concurso.
