LOS pasteleros guipuzcoanos, asociados en Pastelak, han creado una tarta específica para conmemorar el Bicentenario del incendio y reconstrucción de Donostia. El mercado de la Bretxa, punto neurálgico del asalto a la ciudad de hace dos siglos, fue elegido ayer para dar a conocer el nuevo dulce, en el que el fuego juega un papel especial. La capa de arriba de la tarta del Bicentenario está hecha de yema tostada, es decir, quemada. Los pasteleros chamuscaron ayer frente a los curiosos del mercado e invitados al acto la yema azucarada, que impregnó de olor a caramelo la presentación del nuevo producto.
Bajo este sabor, la tarta esconde capas de hojaldre, unidas con nata y con crema. El conjunto está decorado con un perfil de chocolate, muy presente en la sociedad donostiarra de hace dos siglos, con la muralla de la ciudad y el monte Urgull. Según explicó el pastelero Rafa Gorrotxategi: "Hemos fusionado dos imágenes: una de la ciudad de un grabado que hay en el museo de San Telmo y otra de la batalla que está en la web del Ayuntamiento de Donostia y hemos creado moldes con los que conseguimos una imagen de la ciudad en 1813".
La creación de los pasteleros guipuzcoanos puede adquirirse desde ayer en las pastelerías Barrenetxe, Echave y Geltoki, de Donostia, así como en otros comercios especializados del resto de Gipuzkoa como Gorrotxategi, en Tolosa, Sayalero en Zarautz, Unanue en Ordizia, Egaña en Azpeitia y Murumendiaran en Elgoibar. Como este manjar tiene en el hojaldre uno de sus ingredientes principales hay que hacerlo en el día, por lo que se pueden pedir de encargo en los establecimientos de pastelería unidos a la iniciativa.
La presentación del nuevo dulce, que aspira a convertirse en un clásico de la capital guipuzcoana, contó con la presencia de los creadores de la tarta, que se encargaron de dar el último toque in situ quemando la yema y evocando así el incendio de la capital guipuzcoana. El concejal de Desarrollo Económico y Empleo, Josu Ruiz, alabó la iniciativa de los pasteleros que enmarcó dentro de los actos del Bicentenario.
La nueva creación comestible cuenta como madrina con la escritora Toti Martínez de Lezea, que dedicó una de sus novelas históricas al acontecimiento que se conmemora este año. Sin embargo, la escritora alavesa no pudo acudir a la presentación de su dulce ahijado, ya que tuvo que recoger ayer un nuevo premio por su labor, en este caso el Perretxiko de Plata de Orduña.
en julio
1.500 raciones en una tarta gigante
La asociación Pastelak colaborará de otras formas con los actos del Bicentenario de la quema y reconstrucción de la ciudad, según anunciaron sus representantes. Por ejemplo, el 21 de julio crearán una tarta gigante para 1.500 personas que se instalará en la plaza de Cervantes, coincidiendo con una regata internacional de stand up paddle, en la que también participarán familias. Los trozos de tarta se repartirán entre los participantes y el público.