Donostia. El Gobierno de Donostia aprobará su proyecto de Presupuestos para 2012 antes de un mes. El delegado de Hacienda, Jabi Vitoria, explicó durante el Pleno que tuvo lugar ayer que el 9 de enero se reunirán los consejos de administración de los organismo autónomos municipales para aprobar sus cuentas, tras lo que la Junta de Gobierno estará lista para aprobar el Presupuesto consolidado para el próximo año, que después deberá debatir y ratificar el Pleno.
Vitoria respondió así al PSE-EE, que en una moción reclamaba contar con la propuesta del Gobierno de Bildu en un plazo de 30 días dado que, según apuntó el concejal Ernesto Gasco, el Gobierno había incumplido su promesa de presentar las cuentas primero el 15 de diciembre y el luego el día 31. Aunque la moción se aprobó por unanimidad, el portavoz jeltzale, Eneko Goia, se dirigió al PSE-EE para indicarles que ellos no eran los más apropiados ni los más "legítimos" para hablar de plazos dado que en las últimas legislaturas de Odón Elorza, en pocas ocasiones se presentaron las cuentas a tiempo.
Vitoria aseguró que Bildu siempre ha defendido que unas cuentas "creíbles y a tiempo", pero "siempre en ese orden".
Igual que en este punto, también en otros, aunque se aprobaran por unanimidad, los concejales mostraron que llevaban las espadas bien afiladas y no faltaron los reproches.
bellas artes A lo largo de la sesión plenaria, el concejal de Urbanismo, Ricardo Burutaran, anunció que el Plan Especial del Protección Urbanística Catalogado (Pepuc) estará listo en 2012 -este documento es el que establece los grados de protección de los edificios-. Burutaran respondió así al PP, que pedía que en un plazo de cuatro meses se diese una solución a la situación del Bellas Artes para que se pueda convertir en un hotel (el edificio está protegido). El popular José Luis Arrúe explicó que este complejo tendría 90 habitaciones y permitiría el empleo de 50 personas.
El responsable de Urbanismo le respondió que con esta moción se pretendía una "interferencia política" en una cuestión técnica e indicó que Arrúe no habló de la "importancia de la protección del edificio". El PSE-EE no apoyó la iniciativa popular y alegó que no conoce la propuesta concreta para construir ese hotel.
El concejal jeltzale Iñaki Gurrutxaga expuso que la posición de su grupo era favorable a la moción del PP y aseguró que su formación desea que se desbloquee la situación de la antigua sede de la OSE, de manera que se ayude al "fortalecimiento de la economía de la ciudad". Indicó que puede llevarse a cabo un proyecto "fiel" al diseño actual.
unanimidad y discusión El Pleno también ratificó por unanimidad la concesión del Tambor de Oro a la Behobia-San Sebastián y la entrega de las Medallas al Mérito Ciudadano a la Hospitalidad de Lourdes, al profesor de danza Peter J. Brown, a la pescatera Andresa Portugal, al escritor Ramón Saizarbitoria y al cofundador de la asociación de vecinos de Txomin, Joaquín Pérez.
Los reproches volvieron a la hora de aprobar la inclusión del Patronato de Euskera en la estructura del Ayuntamiento. En las filas socialistas tomó la palabra Marisol Garmendia y remarcó el trabajo de la entidad en la "promoción" y "recuperación" del idioma en las dos últimas décadas. Pero recriminó a Bildu que hubiese "despreciado" este trabajo públicamente en el mintzodromo del día Internacional del Euskera (3 de diciembre). Garmendia denunció el "sectarismo cultural" del Gobierno: "Confiemos en que la desaparición del patronato y su conversión no borre de un plumazo las políticas que hasta ahora se han llevado a cabo".
Txapartegi respondió que el Gobierno socialista en Vitoria había retirado subvenciones para aprender euskera a través de Habe. "Es irónico pedir a otro lo que no hace uno en casa", aseguró.
Otro de los puntos que generó una curiosa discusión fue el de la nueva nomenclatura de la ciudad. El Pleno aprobó que haya dos nombres oficiales, Donostia cuando se hable en euskera y San Sebastián, al hablar en castellano. Cuando se escriban ambos, en vez de un guión habrá una barra, dado que esa es, según Euskaltzaindia, la forma correcta de escribirlo. Pero generó polémica.
Garmendia acusó a otros grupos de evitar "intencionadamente" el nombre San Sebastián en las comunicaciones. Aseguró que esa actitud "puede resultar pueril" y "llevar al talibanismo político". El portavoz popular, Ramón Gómez, explicó que "la utilización de Bildu de este acuerdo" le generaba ciertas dudas, mientras que la concejal jeltzale Miren Azkarate se alegró de que se tomasen en consideración las indicaciones de Euskaltzaindia. Propuso la redacción de "un manual de instrucciones" para saber cuándo se debe utilizar cada nomenclatura.