Donostia. EuskoTren completó ayer el cale del túnel entre Loiola y Herrera, con una longitud de dos kilómetros y que ha requerido más de dos años de trabajo. El túnel forma parte de las obras para desdoblar la línea del Topo y construir una nueva estación soterrada en Herrera, que reordenará todo el entorno.
El proyecto recoge el desplazamiento hacia el puerto de la N-I, con el fin de "crear una gran plaza que estará conectada a la de San Luis Gonzaga mediante escaleras y un ascensor panorámico". La comunicación con el frontón y el barrio de Trintxerpe, desde la futura plaza de la estación, se establecerá a través de pasos peatonales y mediante una nueva rampa.
La estación de Herrera estará semisoterrada y contará con andenes laterales. El acceso a los andenes se realizará a través de escaleras y ascensor para permitir la accesibilidad de las personas con movilidad reducida. El vestíbulo de la estación estará situado a cota de plaza.
El desdoblamiento del tramo Loiola-Herrera, que permitirá ofrecer servicios de trenes con intervalos de 7,5 minutos, supone una inversión total de 71,7 millones de euros. La obra se inició en marzo de 2009 y en este tramo se incluye, asimismo, la construcción de la nueva estación, también soterrada, de Intxaurrondo, que podría abrirse a finales de 2012.