Donostia. El grupo municipal del PNV reclamó ayer la creación de un mapa de emisiones electromagnéticas que permita controlar su influencia en la salud de las personas, especialmente en espacios públicos en los que se da una mayor presencia de niños, como los parques infantiles.
El edil nacionalista Martin Ibabe señaló ayer que el sistema Wi-Fi implantado en todo el litoral donostiarra, así como en 25 edificios municipales y en otras zonas exteriores de la ciudad, unido al uso de los teléfonos móviles y del sistema bluetooth, genera concentraciones de campos electromagnéticos en determinados puntos urbanos.
Aunque reconoció las "ventajas" que reporta a la ciudadanía el acceso a las nuevas tecnologías, el concejal incidió en que la Administración debe garantizar también la protección de la salud pública de los ciudadanos. Por este motivo, incidió en la necesidad de "abordar los problemas que pudiera suponer el uso masivo de estas tecnologías" con el fin de "racionalizar su uso" en los ámbitos donde se concentran muchos menores.