Kauldi Odriozola: “Ir a los Juegos es muy bonito, pero vamos a por un buen resultado”

¿Cómo se viven estos últimos días de la preparación?

Con mucha ilusión. Estamos con muchas ganas de hacer un buen trabajo en los Juegos. Estamos entrenando mucho y bien. Estamos contentos.

Lo hacen de la mano de un Jordi Ribera que da la sensación de que le gusta marcar bien cada fase de la preparación.

La primera semana fue más física, también con más jugadores; la siguiente fase se redujo el grupo en un par y ya nos dijo claro que para esta última semana quería 17 jugadores y aquí estamos ya. Una semana en Noruega, con el amistoso del otro día, y ya con la vista puesta en los Juegos.

Poco antes del comienzo de la fase final de la preparación, la convocatoria definitiva. ¿Cómo lo vivió?

Fue una noticia increíble, es con lo que sueña un deportista. Jugar unos Juegos es una experiencia increíble. Me llevé una gran satisfacción y motivación de estar en unos Juegos para conseguir un gran resultado. Esa motivación la tenemos todos y estamos muy ilusionados.

¿En qué piensa al recibir la noticia?

Es un cúmulo de muchas cosas. Durante la preparación sueñas con ese momento y cuando llega lo tomas con mucha alegría. Piensas en la familia y en toda la gente que te ha ayudado a llegar ahí… Es una sensación muy bonita, pero no sabría describirla.

En el caso del balonmano está la particularidad de a diferencia de cualquier partido oficial, las convocatorias no son de 16 jugadores, sino de 14. ¿Tiene más valor entrar?

Sí, además de que es cada cuatro años, porque los Europeos y Mundiales son cada dos. En este caso además son las convocatorias de 14 jugadores, por lo que los otros tres de reserva si no hay lesión, en teoría no participan. Hay una dificultad añadida y hay mucha competencia para entrar.

En su caso, parecía estar en la carrera por ir a Tokio, pero aquella operación de mayo, le impidió ir a aquellos Juegos. ¿París quita la espinita?

Lo de Tokio no me lo tomaba tanto tampoco, porque sabía que lo tenía muy-muy difícil. Entonces y ahora hay grandísimos jugadores en mi puesto, pero en aquel momento no me veía muy dentro. En estos tres años sí que ya he participado en más Europeos y Mundiales, en más concentraciones… Me he visto más dentro de la selección y con más oportunidad, aunque siempre está la duda de si entraré.

¿Qué momento de los Juegos tiene ganas de vivir?

La entrada en la Villa Olímpica, porque ahí te juntas con los mejores deportistas de todo el mundo. Es una experiencia muy bonita. Y en lo deportivo, sueñas con ganar una medalla o algún buen resultado. Ir a los Juegos es muy bonito, pero todos vamos con la intención de hacer lo mejor posible. Sería muy bonito conseguir un buen resultado. 

Si tomamos los Juegos como final de temporada, es un colofón inmejorable a un año en el que en lo personal ha sufrido lesiones. ¿Las buenas sensaciones de la preparación le ayudan a dejarlas?

Sí, ha sido un 2024 un poco complicado por esas lesiones. Me rompí el quinto metatarsiano en el Europeo, lo que me tuvo de baja tres meses, y al volver estaba un poco falto de ritmo y tuve un par de lesiones más. No he tenido ninguna suerte en el comienzo del año, pero ya está olvidado: me encuentro muy bien tanto física como mentalmente, y con muchas ganas de ir a los Juegos.

Desde los Santos Labaca, Juan Miguel Igartua, Nacho Novoa, Jesus Albisu, Patxi Pagoaga y Juanjo Uria en los ‘70-‘80, hasta Julen Aginagalde en Tokio, ¿qué valor le da a añadir el nombre de Kauldi Odriozola a la lista de los balonmanistas guipuzcoanos?

Me siento un afortunado de estar en esa lista con esos grandes nombres. Estoy con ganas de poder hacer un buen papel y que a mí también se me recuerde, si se puede, con una medalla.

Acude a París con Imanol Garciandia, dos guipuzcoanos por primera vez en una selección olímpica desde Londres’12, con Mikel Agirrezabalaga y Aginagalde. ¿Qué supone para el balonmano de Gipuzkoa?

"Es muy importante para Gipuzkoa, para los chavales y para toda la gente que trabaja en nuestro balonmano"

Es muy importante para Gipuzkoa, para los chavales y para toda la gente que trabaja en nuestro balonmano. Se demuestra que trabajando, con buenos equipos como el Bidasoa como modelo y principal representante pero otros muchos clubes que trabajan muy bien, la cantera se está cuidando. Para todo eso es muy importante que podamos representar a Gipuzkoa.

Hagamos memoria. ¿Aquel jugador que llegó a la final del Campeonato de España juvenil con el Pulpo contra el Barça y aquel joven que llegó al Bidasoa pensaba en unos Juegos?

Sinceramente, no. Cuando estaba en el Pulpo, mi sueño era jugar en el balonmano profesional, que ya lo veía complicado. He ido quemando etapas poco a poco, con la ilusión de mejorar día a día. Entonces no me hubiera creído que llegaría a los Juegos, pero lo he conseguido y estoy orgulloso de haber podido conseguirlo.

¿Cómo llega la selección a París? ¿Lo del ‘final de ciclo’ es cosa del entorno?

Todos vamos a por todas. Es verdad que hay jugadores veteranos, pero si comparamos la lista de Tokio hay gente que repite, pero también hay gente nueva. Somos gente con hambre y con ambición, que son los valores que nos han inculcado: jugar todas las competiciones como si fuera la última, con ganas de conseguir cosas. La gente jugará este campeonato como cualquier otro o incluso más, porque los Juegos son cada cuatro años y son una vivencia increíble.

Eslovenia, Suecia, Japón, Alemania y Croacia para la fase de grupos. Casi nada.

En los Juegos, quitando algún equipo que puede ser algo inferior, todos los equipos son muy potentes, sobre todo los europeos y Egipto. Va a haber que luchar mucho cada partido para lograr resultados. Estamos ilusionados y estamos trabajando para ello.

A estos niveles se conocen muchísimo, tanto entre selecciones como entre jugadores que se enfrentan con sus clubes. ¿Dónde estarán las claves de la primera fase?

"Para nosotros lo más importante es hacer una buena defensa, porque cuando se hace, la portería también para y nos encontramos más cómodos"

No sé, para nosotros lo más importante es hacer una buena defensa, porque cuando se hace, la portería también para y nos encontramos más cómodos. Una de las claves puede ser esa, porque en ataque encontraremos soluciones. Si supiéramos las claves de antemano, todos sabríamos ganar partidos y tampoco es tan fácil.

A los cuartos se clasifican cuatro de cada grupo, parece asequible, pero en una selección que no deja de lado los posibles cruces, ¿hay margen de error en un torneo así?

Margen de error, cero, porque también es importante el puesto en la clasificación. Todos los partidos saldremos a morir.

¿Suecia es el rival a batir en esta primera fase?

Viendo los resultados de los últimos campeonatos puede serlo, pero somos prudentes, porque por ejemplo Croacia nos ganó de 10 en el último Europeo haciendo ellos un gran partido aunque luego no jugaron así. Eso demuestra que contra cualquier rival hay que salir a tope porque te puede ganar, de la misma manera que tú puedes ganar a cualquiera.

Una medalla olímpica, ¿se piensa o se sueña?

Incluso sin quererlo, pero claro que lo sueñas. Todos los que estamos aquí soñamos con llegar a unos Juegos y sueñas con ello. Sabemos de la dificultad, que es muy complicado, pero soñar, sí que soñamos.