Rueda de prensa. José Luis Mendilibar recordó ayer que todos los equipos tienen "problemas con las ausencias" y que el Barcelona cuenta con "una de las mejores plantillas" de la Liga, por lo que puede amortiguar la baja de Leo Messi, que incluso "les puede hacer jugar más en equipo". Pese a la dificultad del duelo, el de Zaldibar indicó que el Eibar no cambia "por la forma de jugar del rival". "Sí tenemos en cuenta cómo pueden salir jugando, pero no por eso tenemos que cambiar demasiado, sino hacer hincapié en qué pueden hacer ellos para estar atentos nosotros y salir a defender bien".

- El Eibar ascendió a Primera División en 2014. Desde entonces han transcurrido más de seis años. Siete temporadas contando la actual. Y el cuadro armero no ha sido capaz aún de puntuar en el Camp Nou. No se trata de una estadística especialmente llamativa, pues de todos es sabida la dificultad que supone arrancar puntos del feudo culé. Pero sí supone el historial de los guipuzcoanos en el campo del Barça una espinita clavada que tratarán de quitarse esta tarde. La ocasión parece propicia, pues resulta de dominio público que el equipo de Koeman ya no infunde el respeto de versiones anteriores. Y además no juega Messi, con molestias físicas.

El Eibar contará hoy con las bajas ya conocidas de Cote y de Roberto Correa, a las que se suman las que dieron a conocer ayer los servicios médicos del club: Anaitz Arbilla y Kevin Rodrigues por molestias musculares, y Bryan Gil por una "enfermedad común leve". El técnico de Zaldibar recupera por contra al defensa Paulo Oliveira, al centrocampista polaco Damian Kadzior y a los delanteros Yoshinori Muto y Sergi Enrich, todos ellos ausentes en el partido contra el Alavés.

En el Barcelona, por su parte, no pueden jugar el lesionado Messi y el sancionado Jordi Alba. Asumidas ambas ausencias, los debates en la Ciudad Condal se centran en conocer si Koeman repetirá el esquema táctico 3-5-2 con el que ensayó en Valladolid y que tan buen resultado le dio. Todo apunta a que así será, con Junior Firpo en el carril zurdo y Pedri ejerciendo como enganche por detrás de una dupla ofensiva que integrarían Griezmann y Braithwaite. El futbolista canario se encuentra en un momento dulce.