- El exjugador del Athletic Aritz Aduriz, que este pasado jueves anunció su retirada debido a una inminente operación de cadera, aseguró ayer que no necesita que le hagan ningún sitio en la gabarra de cara a una hipotética celebración si vencen a la Real en la final de la Copa del Rey, sino que la “saquen” y que cumplan con la “espinita clavada” que le ha quedado; poder levantar el trofeo copero. “No necesito hueco en la gabarra, solo que la saquen. Habrá tiempo de celebrar donde sea, el sitio no importa. Lo importante es que todo aficionado del Athletic pueda disfrutar de esto y yo incluido, como uno más. Eso voy a ser ahora, un aficionado más”, se sinceró el ya exjugador del Athletic.

Junto a su mujer y dos hijas, sus compañeros y cuerpo técnico -que le recibieron con un pasillo de honor-, así como el presidente del club, Aitor Elizegi, Aritz Aduriz dio su última rueda de prensa desde el punto de penalti del nuevo San Mamés, de espaldas a una de las porterías donde ha marcado buena parte de los 172 goles (de los 219 goles totales en su carrera) que logró como león, y el último ante su afición.

Un adiós distinto al soñado, pero que le llega tras una prolífica carrera. “La espinita será la que ojalá puedan conseguir ellos, cuando sea. Ojalá podamos celebrar todos esa ansiada Copa y poder subir a esa gabarra. Creo que no hubiese podido aguantar ni hasta verano. Hay un límite, físicamente no hubiese podido y además creo que es mejor que yo no esté, porque el equipo es mejor sin mí en este momento”, reconoció un Aduriz apesadumbrado.

“La hostia”, se le escapó visiblemente emocionado tras ver un vídeo con 20 de sus mejores goles, en honor a su dorsal con el Athletic. “Es imposible imaginarse estar sentado en San Mamés, haciendo una rueda de prensa en esta situación. Me gustaba el balón, lo que más de pequeño, pero, ¿cómo iba a imaginar que iba a poder siquiera jugar un partido con la camiseta del Athletic? Intentaba hacer lo que me gustaba. Si he llegado a este punto, con 39 años, es porque he hecho lo que más me ha gustado y lo he pasado muy bien”, reconoció.

Pero en su pelea interna por seguir hasta esa final o por retirarse ya, se terminó rápido. “Llevaba luchando bastante tiempo. Podía aguantar, podía soportarla, pero últimamente menos que más podía ayudar al equipo. Pero después de este confinamiento y estar tanto tiempo en casa, ha sido definitivo. No ha sido una pelea equilibrada porque la balanza se ha desequilibrado rápido por el cuerpo, que tiene un límite. La cadera ha desequilibrado la pelea”, reconoció.

En cuanto a su adiós, sobre el césped del nuevo San Mamés, pese a ser con los asistentes separados entre sí y con mascarillas, siguiendo las directrices de salud, cree que es “demasiado”. “Esto es mucho más de lo que creo que merecía, muchísimo más”.

El delantero ya había anunciado antes de iniciarse esta temporada que esta sería la última en activo. El jugador deja el Athletic como su máximo goleador del siglo XXI con 172 tantos, solo superado por históricos como Zarra (335), Bata (208), Dani (199), Gorostiza (196) e Iraragorri (179).

“Es mejor que yo no esté, porque el equipo es mejor sin mí en este momento”

Exjugador del Athletic