ACUNSA GBC Faggiano (8), Radoncic (16), Oroz (2), Magarity, Okouo (6) -cinco inicial- Dee (21), Span (3), Carlson, Tomás (8), Olaizola (2) y Motos (2).

COOSUR BETIS Feldeine (15), Campbell (5), Kay, Ouattara (13), Ndoye (23) -cinco inicial- Randle (4), Borg (14), Almazán, Magassa (2), Tisma (6), Torres, Jordan. (9)

Parciales 17-27, 20-22, 11-20 y 20-22.

Árbitros Peruga, Sánchez y Manuel.

Incidencias Encuentro disputado en llunbe, sin público en las gradas.

- El Acunsa GBC está cada vez más cerca del descenso a la LEB Oro (68-91). El conjunto guipuzcoano desaprovechó la oportunidad de reengancharse a la lucha por la salvación en Illunbe y ante un rival directo, el Betis, y se queda ahora a dos victorias de la permanencia, y con el average en contra.

El equipo de Marcelo Nicola no presentó batalla y el conjunto andaluz sufrió menos de lo que esperaba para lograr una amplia victoria fundamental para sus intereses y de paso casi desahucia de la máxima categoría a un Acunsa GBC que no dio la talla desde el salto inicial.

El Betis comenzó como un vendaval. La conexión Feldeine- Ndoye funcionó en un primer cuarto en el que los andaluces rompían el partido con el 7-16 y comenzaban a sumar diferencias ante un apático conjunto local, que no parecía ser consciente de que éste era de los últimos trenes que podía coger.

El primer parcial, con un GBC desapareciendo en ataque, dejó ya muy encarrilado el partido a favor del Coosur, que se había destapado con un aluvión ofensivo aunque en un arreón final del GBC, con triple casi sobre la bocina de Dee, dejara el partido remontable (17-27).

Esa canasta del americano dio impulso a su equipo, que llegó a ponerse a dos puntos en un abrir y cerrar de ojos (25-27), para que los beticos se pusieran las pilas y volvieron a retomar la faena, otra vez con el acierto de Feldeine, aunque Dee comenzaba a ser un problema para sus intereses, con 10 puntos casi seguidos.

El Betis apretó otra vez del brazo de Ndoye y Feldeine, y volvió a golpear a un conjunto donostiarra que se marchaba a vestuarios doce abajo y escasas opciones de poder darle la vuelta a este trascendental choque. El conjunto de Joan Plaza mantuvo la intensidad en la segunda mitad, eran los minutos claves y estos fueron para un concentrado Betis, que siguió amasando renta en el tercer cuarto para ponerse 21 arriba con los tiros libres de Randle, dejando virtualmente finiquitado el encuentro a falta del último cuarto (46-67).

Los de Marcelo Nicola bajarían los brazos en el último cuarto porque ya no había nada que hacer, el Betis jugó a gustarse sin hacer sangre y obtuvo una plácida victoria que nadie pensó la víspera que fuera a ser tan sencilla.

El equipo donostiarra se queda ahora a dos victorias de los puestos de salvación, con el average desfavorable