Lucas Eguibar, subcampeón esta temporada de la Copa del Mundo de snowboard en la modalidad de cross, tiene claro que lo que le mueve y la ha movido siempre “es el hambre” que tiene por ganar, lo que provoca que trabaje “muy duro”, incluso con la lesión que tuvo en la espalda y que le hizo pasar un tiempo “bastante duro”. “Lo que me ha llevado y me sigue llevando es el hambre que tengo de ganar; eso me lleva a trabajar muy duro. A veces no quiero ir a entrenar, pero tengo muy claro el objetivo y para llegar a él tengo que hacerlo”, señaló Eguibar durante su presencia ayer, junto al también donostiarra Álvaro Romero, campeón del mundo junior de su deporte, en el espacio Escuela 42 en el Distrito Teléfonica de Alcobendas (Madrid).

Eguibar, de 29 años, recalcó que le han “enseñado que el camino se hace por esfuerzo y por constancia”. “Cuando termino la temporada ya estoy pensando en la siguiente. Aunque haya sido segundo este año en la Copa del Mundo, todos vamos a partir igual y no quiero perder, quiero dar el máximo porque cuando lo hago y salen los resultados es cuando disfruto”, añadió.

El guipuzcoano, también doble medallista de plata en Mundiales y con cinco victorias en la Copa del Mundo, aseguró que le encanta “el deporte” y que “desde pequeño” siempre ha sido “competitivo”. “Y eso me ha llevado donde estoy porque siempre he querido ganar y ganar”, admitió después de una temporada exitosa y tras superar “un año y medio bastante duro” por sus problemas de espalda.

“Sentía que no podía dar mi cien por cien, que algo estaba pasando; no podía hacer nada”, agregó Eguibar, quien encontró la solución en un tratamiento con células madre para algo que “no es una lesión como tal” y que era producto del “desgaste” de practicar “un deporte superagresivo”. “Sólo podía entrenar una hora y en la carrera era apretar los dientes porque no se podía hacer nada con el dolor. Lo bueno es que son de un minuto y me centraba en bajar y luego me iba a la cama a descansar”, subrayó.

El rider celebró el apoyo de una marca como Movistar, sobre todo por haber puesto en marcha la Copa de España y porque necesitan ayuda económica “para viajar y entrenar”.

Romero: “He tenido una progresión rápida”

Por su parte, Álvaro Romero se mostró satisfecho de tener hasta el momento “una progresión rápida” y reconoció que le motiva “ganar”, como a Lucas Eguibar, del que le gustaría que le aconsejase cómo mantenerse tanto tiempo “a alto nivel”.

El también guipuzcoano comenzó a practicar el snowboard a los 10 años y se refirió a una época complicada donde fue clave el trabajo con un psicólogo, que le ayudó “bastante”. “Desde ahí todo fue mejor, me vi más motivado y fuerte y las carreras iban saliendo con ayuda de mi psicólogo y de mi equipo. Las cosas salen y cuando no, son duras, pero no hay que preocuparse en exceso porque si sigues trabajando van a llegar y así ha sido este año, en el que empecé un poco flojo y acabé de la mejor manera”, explicó.

El joven rider también destacó la importancia de las pruebas de la Copa de España Movistar, donde ha “crecido”, y de las Becas Podium. “A nivel personal es una ayuda muy grande porque este es un deporte un poco costoso, también a nivel de motivación y de pensar en que puedo hacerlo bien”, comentó.

“Cuando entré en el equipo hice a distancia 2º de Bachillerato y el año pasado hice la Selectividad. Este año empecé Fisioterapia en Bilbao, pero era presencial y se me hizo muy duro porque no podía ir a clase y lo dejé. Ahora estoy haciendo Magisterio online en La Rioja y así lo puedo compaginar”, detalló Romero sobre la dificultad a su edad de poder estudiar y competir.

Elogios a ambos

Por su parte, el presidente de la Federación Española de Deportes de Invierno (RFEDI), May Peus, calificó a los dos riders como “dos grandes deportistas”. “Uno, consagrado, maduro y veterano, y otro joven, con ganas y con la suerte de tener a gente como Lucas, que sigue dando guerra y le quedan muchos años, y Regino”, manifestó.

“Poder tener dos referentes en deportes emergentes por los que apostamos es una doble satisfacción. Podemos dar continuidad a los que vendrán y que seguramente querrán ser Lucas y Álvaro. Son los dos mejores deportistas de la RFEDI”, sentenció el dirigente.