El donostiarra Lucas Eguibar, flamante campeón del mundo de boardercross de snowboardboardercross de snowboard, ha declaró este jueves desde la estación sueca de Idre Fjäll, donde ha ganado el oro intercontinental, que "desde los Mundiales de Sierra Nevada", en 2017, lleva "luchando por un resultado como este".

"No me lo creo aún. Ha sido una carrera dura, pero estoy contentísimo, ahora mismo", ha explicado, en conversación telefónica con Efe desde Suecia, el campeón guipuzcoano, ganador de la Copa del Mundo 2014-15 y doble medallista de plata -individual y por equipos- en los Mundiales de Sierra Nevada (Granada) hace cuatro años.

"No sabía muy bien las estrategias al principio. Dudaba. Sabía que al final se cogía mucho rebufo, pero no lo tenía claro", ha comentado desde la gélida Idre Fjäll, nacido en Donostia y que el pasado martes festejó su 27º cumpleaños con el tercer puesto en la clasificación, que auguraba un buen resultado este jueves.

"Las primeras mangas salí fuerte, las otras como que me calmaba. Y en las semifinales tenía las piernas que no podía casi ni andar, me tuvieron que ayudar a moverme", ha explicado Eguibar tras proclamarse campeón del mundo de boardercross y en espera de pasar el control antidopaje.

"En una de las rondas he caído en un planito y me duele mucho la espalda. No sé cómo voy a estar mañana. Estoy reventado ahora mismo, pero estoy que ni me lo creo", ha señalado el flamante campeón mundial.

"No sabía qué pensar al cruzar la meta, estaba soñando, en una nube", manifestó Eguibar, eufórico aún tras lograr el mejor resultado de su carrera deportiva.

"Llevo muchos años luchando por un resultado como éste, casi desde los Mundiales Sierra Nevada. Y no llegaba. Han sido cuatro años muy duros, pero al fin ha llegado. Estoy muy contento, no me lo puedo creer, es increíble", manifestó a Efe este jueves desde Idre Fjäll el flamante campeón del mundo de boardercross.