El Eibar cumplió con el trámite copero y logró anoche el pase a la siguiente ronda del torneo del KO con un triunfo por 0-2 ante el Racing Rioja con dos tantos de Pedro León, el segundo, eso sí, en la recta final del partido.

El conjunto armero, con sus suplentes y jugadores del filial en la alineación, dominó en todo momento a un modesto rival de Tercera División, fundado hace apenas hace dos años, que ofreció una imagen digna y logró defenderse hasta el último tramo del choque, cuando encajó el segundo tanto.

El equipo guipuzcoano, en cualquier caso, fue mejor en todos los aspectos del juego, pero, tras su primer gol, tampoco mostró excesiva ambición y por eso le costó cerrar el partido.

A los de Mendilibar les costó prácticamente media hora abrir la lata local. El Racing Rioja aguantó gracias al orden defensivo y a unas ideas muy claras sobre cuál era su papel en el encuentro, el de aferrarse a su propia portería y esperar poder salir en alguna ocasión. De hecho, el conjunto riojano planteó el partido con una línea de cinco defensas en torno a su portero y el resto de jugadores, salvo el atacante Manu Calvo, dispuestos a pelear en cualquier zona del campo.

Con esas premisas, los riojanos consiguieron a duras penas contener a un Eibar serio y solvente, que no quiso volver a saborear tragos amargos del pasado -por ejemplo, como el de la última edición, en la que el Badajoz, de Segunda División B, le apeó de la competición en la tercera ronda al endosarle un 3-1- y que saltó al campo dispuesto a resolver pronto, y ya en un cuarto de hora había logrado forzar tres saques de esquina.

No obstante, también es cierto que el equipo de Mendilibar no era claro en sus ataques, que morían antes de rematar, con la excepción de un disparo de Unai Arieta, que ayer tuvo un buen partido para foguearse, en el minuto 6 y otro de Pedro León, el héroe del partido, en el 10, que sacó el portero Raúl Heras.

El primer tanto llegó en el minuto 35 Cuando el partido parecía más espeso y el Racing Rioja trataba de estirarse, llegó otra buena acción de Pedro León, en el minuto 35, en un sutil remate de cabeza ante el que el portero del Racing no pudo hacer nada. De esta manera, el murciano, que esta temporada está contando con escasos minutos de juego, reivindicó su figura.

El primer tiempo dio para poco más, salvo la mejor acción de los riojanos, que se tradujo en una jugada por la izquierda con un buen centro al que no llegó Manu Calvo.

Y el segundo tiempo comenzó otra vez con el Eibar muy interesado en resolver pronto la papeleta y tuvo una ocasión inmejorable, en el primer minuto, por medio del lateral portugués Rafa Soares, que solo, a portería vacía, remató de cabeza alto.

Pero, a pesar de ese inicio ambicioso, el Eibar perdió fuelle pronto y, aunque siguió exhibiendo su superioridad solo por la calidad que atesoran unos jugadores de mayor categoría, tampoco tuvo muchas llegadas de peligro.

Incluso el fútbol plano de los eibarreses permitió al Racing Rioja dignificar más aún su papel con un juego competitivo y agresivo, que por momentos le permitió salir de su campo y soñar con conseguir el empate.

Aunque, eso sí, poco a poco su inferioridad física fue más evidente y le llevó a dejar demasiados espacios cuando trataba de irse hacia arriba. Algo que le costó el segundo gol, en una jugada por la izquierda en la que Pedro León llegó en velocidad al área riojana y no perdonó para materializar el 0-2, ya en la recta final del partido.

Edu Expósito, que saltó al terreno de juego desde el banquillo en el minuto 60 al igual que Pape Diop, firmó un gran disparo en el minuto 86, desde la frontal del área, para tratar de hacer el 0-3, pero el portero Raúl Heras respondió bien y el partido no dio para más. Por lo tanto, el Eibar cumplió su cometido y ya piensa en el compromiso liguero del domingo contra el Real Madrid en Ipurua.