PAMPLONA - Olaizola II e Imaz hicieron ayer los deberes en el Labrit. Los de Asegarce, que tenían que ganar para sumar su séptimo punto y poner pie y medio en semifinales, deberán esperar a los resultados de hoy en Tafalla y mañana en Tolosa para conseguir matemáticamente un billete en semifinales. Si Ezkurdia-Zabaleta vencen 22-19 hoy o menos mañana y Elezkano II-Rezusta ganan mañana en Tolosa, las dos últimas jornadas serán un mero trámite.
Todo lo contrario que Irribarria y Jaunarena, que ayer quedaron virtualmente eliminados. El de Arama y el leitzarra podrían quedarse fuera de semifinales hoy mismo si ganan Ezkurdia y Zabaleta, pero incluso si los navarros pierden tendrían que ganar los dos choques que restan y esperar otros resultados, una combinación casi milagrosa.
La pareja colorada llegó a 22 cuajando un gran partido. Olaizola II volvió a demostrar por qué está el primero en la clasificación individual del Parejas. El de Goizueta remató, defendió -increíble su cortada cruzando el gancho de Irribarria en el 8-3- y le ganó la batalla personal al delantero de Arama, que pareció olvidarse de la única estrategia posible contra Aimar, cargar a Imaz, y se batió en un duelo en el que salió perdedor.
El encuentro empezó con un claro parcial para colorados. Aimar volvió a firmar un inicio impresionante, con siete tantos cosechados en los primeros once. Los azules reaccionaron hasta el 13-10. Pero un gran gancho de Aimar lo rompió todo. Los colorados se escaparon en el marcador, ante la impotencia de Irribarria y Jaunarena, que no sabían cómo parar el recital de Aimar. Cuando los azules recuperaron el saque y pudieron cambiar de estrategia, Irribarria cometió errores, desdibujando el gran partido de Jaunarena, que tan solo cometió un error y demostró que puede estar tiempo en la elite, ya que aguantó, cubrió cancha y pegó cuando debía hacerlo.
Con el 19-14, el delantero de Arama mandó una volea al colchón y con ella tiró sus pocas opciones de remontada. - N.G.