Bilbao - “Es un pelotari muy duro, demasiado a veces”, comentó Iñigo Simón, médico de Asegarce, después de atender en el partido de ayer a Danel Elezkano, que protagonizó el susto del día al recibir un pelotazo en la cabeza por parte de Aritz Lasa. El zaratamoztarra no se rinde nunca. Siempre va hacia delante a pesar de que las condiciones sean las más adversas posibles. No fue la mejor tarde del pelotari vizcaino, dominado por su oponente, víctima de un golpe muy feo y con la rodilla lastimada desde la mitad del choque. Pero él siguió adelante, sin buscar excusas, intentando dar la vuelta a un encuentro que se le puso muy cuesta arriba. Todo parecía escrito para una remontada heroica, sin embargo, en la jaula del Cuatro y Medio hay dos protagonistas y Aritz Lasa fue esta vez el más acertado. Controló el inicio, rompió el choque para lograr una ventaja importante y no se puso nervioso cuando Elezkano se la jugó al todo o nada. Gracias a ello, el urretxuarra venció por 22-20 y estará en los octavos de final, donde le espera otro guipuzcoano, Jokin Altuna.

Aritz Lasa controló el choque desde el inicio, a pesar de que no pudo materializar su dominio debido a la espartana defensa del manista de Zaratamo. El urretxuarra pegó y pegó, movió la pelota a sus anchas, pero ahí estuvo Elezkano para dar la respuesta. Jugadas coloradas y resultados de todo tipo. Muchas veces, el delantero de Aspe logró finalizar los tantos tras buenas jugadas, pero en otras ocasiones la chapa fue su mayor enemiga y le hizo acumular errores. El resultado se mantuvo igualado hasta el 10-10, aunque antes de eso, con el 9-7, el partido estuvo a punto de finalizar debido a un pelotazo de Aritz Lasa sobre Elezkano, que le mandó a vestuarios. Tuvieron que pasar varios minutos hasta la reanudación.

Poco a poco, Elezkano empezó a acusar el cansancio y Aritz Lasa no desaprovechó la oportunidad para poner pies en polvorosa. Un parcial de 7-0 rompió el encuentro y la ventaja se mantuvo hasta el 20-13. Pero Danel no había dicho su última palabra. El puntillero vizcaino decidió cambiar la estrategia. Olvidarse de la férrea defensa y lanzarse a tumba abierta. Ganar o morir. Sin embargo, está táctica casi suicida no dio los frutos esperados por su autor y al final no llegó la remontada. Danel consiguió crear algunos nervios en Aritz Lasa, pero la veteranía del guipuzcoano se impuso y en el peor momento (21-20), sacó un gancho letal que finiquitó el encuentro y dejó fuera del Cuatro y Medio de Primera a Elezkano, que sigue sin poder vencer al urretxuarra en los duelos individuales de los campeonatos.