Una combinación perfecta

Incidencias: Partido correspondiente a las semifinales de la feria de Aste Nagusia de Bilbao disputado en el frontón Bizkaia de Bilbao. 810 espectadores. Menos de un tercio de entrada.

Bilbao - Se deshilachó el partido rápido y se les escapó como arena entre los dedos a Mikel Urrutikoetxea y Jon Ander Albisu. No pudieron. Acabaron sucumbiendo en la tormenta perfecta creada por Juan Martínez de Irujo y David Merino, apoyados por un material del gusto del zaguero riojano, vivo, que se le atragantó al bulldozer de Ataun. No hubo semifinal del torneo Aste Nagusia de Bilbao más que en los primeros compases, en los que crearon los delanteros cierta pimienta cerca del frontis. Actuó el vizcaino con atención pero sin mordiente y el puntillero de Ibero, después de tres partidos seguidos, asombró por su defensa. A Irujo le han crecido los pulmones, las piernas y los brazos. Pero, sobre todo, la intuición.

El de Aspe, si bien ha demostrado el genio en ocasiones como la del pasado viernes en el Donostiako Hiria donde dio un recital ante Jokin Altuna, es un pelotari de volcán y brillo, pero en las últimas fechas se ha atado a una versión más segura, seria y controlada. Apenas erró dos pelotas en todo el encuentro, intentando dos paredes que murieron sin tocar frontis. El resto fue un tratado de control de los tiempos del envite y saber estar. Martínez de Irujo, tipo de fogonazos, ha transformado su rol en el traqueteo de un verano a toda máquina. Asimismo, el de Aspe asomó con una defensa espectacular, agarrando pelotas en el ancho y el txoko bastante peliagudas, porque Urrutikoetxea lo intentó, otra cosa no, aunque no terminara de concretar sus intentos.

Siendo Irujo la punta de lanza, el seleccionador y el timón, el ariete fue David Merino. La sombra del de Villar de Torre va ganando kilómetros en cada choque. Si empezó a medio gas el verano, poco a poco va encontrando al hombre del espejo y de las fotos de años pasados. Merino II se está encontrando. Ayer, con un material que movía con facilidad, con el que se encuentra cómodo y le suelta, puso a Albisu con el pie en tierra, abatido, atropellado, sin incidencia. Varado. A Jon Ander se le hizo el partido un vía crucis enorme. Fue un calvario. Perdió nueve pelotas, estuvo sobrepasado, el bote le atropellaba y no era capaz de mover el cuero. La sangría de yerros puso a Urruti en alerta, que retrasó para ejercer, y acabó portando él la cruz. Fue la combinación perfecta para Irujo y Merino II, que se vieron favorecidos por todos los aspectos de la eliminatoria y ya están en la final del torneo Aste Nagusia del sábado -que retransmitirá ETB2 en euskera, al haber remo en ETB1-.

El duelo se deshizo a toda velocidad. Dos errores de Albisu de salida argumentaron cuál sería el desenlace final. La sangría se estiró al 0-3 y al 2-9. Ya entonces, el ataundarra acumulaba seis yerros. Tocado, desanimado, no le dio la vuelta. Aunque Urruti empezó con viveza, no acabó igual. En las ayudas se desfondó. La falla se amplió hasta el 6-11 y no volvieron a sumar. Juan y Merino, a lo suyo, cerraron la contienda con claridad y holgura en menos de 35 minutos.

Victoria de Altuna III-Tolosa En el festival programado en el frontón de la Ikastola de Elgoibar, Jokin Altuna, que fue el protagonista de los mejores tantos del partido, y Xabier Tolosa se impusieron a Iñaki Artola e Ibai Zabala por 22-18.cartelera