El aspirante

donostia. Al inicio de la pasada edición de la Liga San Miguel se esperaba que fuese Urdaibai la que plantase cara a Kaiku, la gran favorita, pero desde la primera regata, la disputada en aguas de Zierbena, una trainera se presentó como una firme candidata al triunfo. Hondarribia, a las órdenes de Mikel Orbañanos, cosechó seis victorias a lo largo de la competición y hasta el tramo final mantuvo un igualadísimo pulso con los sestaoarras en lo más alto de la general. El noveno puesto cosechado en la segunda jornada de la Bandera de Zarautz fue lo que dilapidó en gran manera sus opciones de triunfo final.

Ese segundo puesto supone todo un logro desde el punto de vista del entrenador hondarribitarra: "Creo que ellos fueron muy regulares, apenas fallaron en ninguna regata. Creo que simplemente medirse con un equipo como el de Kaiku durante todo el verano es algo que tiene mucho mérito". Se muestra muy orgulloso de una temporada en la que incluso consiguieron ganar, por primera vez en su historia, el Campeonato de España: "Tal vez no dimos nuestro mejor rendimiento en la Bandera de La Concha. En el resto de la temporada creo que fuimos muy regulares".

El equipo guipuzcoano inicia la presente temporada con la misma plantilla, lo que hace que nadie dude en señalarlos como una alternativa real al título. Ya no sirve la estrategia de ser el tapado de la Liga: "Es normal que digan eso. Somos una tripulación que mantiene el bote respecto a años anteriores. Viendo el rendimiento del año pasado, es normal que nos vean entre los favoritos. Eso es bueno, es señal de que tienes opciones de andar bien. En cuanto a la presión, no creo que lo que digan desde fuera nos afecte. La mayor presión es la que nos ponemos nosotros mismos. Queremos hacerlo bien, pero tenemos que tener paciencia y, según vaya transcurriendo la temporada, ver a dónde podemos llegar".

Orbañanos arranca la que será su decimosegunda temporada consecutiva como entrenador de Hondarribia. El dato es una muestra de la fe que tiene la directiva en su trabajo. El técnico no se siente cuestionado por más que las metas del equipo hayan alcanzado las cotas más altas: "La directiva sabe que hacemos un buen trabajo. Cada vez me siento más respaldado porque me conocen, saben cómo trabajo y no creo que en ningún momento se perciba que estoy más cómodo o relajado por el hecho de que sume aquí muchos años. Saben que yo mismo me exijo mucho, que dedico mucho tiempo a este deporte y, respecto a eso, estoy tranquilo".

El domingo arranca una nueva oportunidad para ganar banderas. El entrenador de la Ama Guadalupekoa lamenta que la regata de Barcelona llegue antes de lo previsto, anticipándose un poco al momento ideal de forma para empezar a disputar los primeros puntos: "Tal vez el inicio de la Liga nos ha pillado un poquito pronto, pero no hay excusa. Queremos hacer un buen verano, muy completo, y para eso no puedes empezar a tope desde el principio. A pesar de ello, intentaremos dar el mejor nivel posible en la cita de Barcelona".

Tal vez repitan el exitoso debut de 2012 en Zierbena. Si lo hacen, Ioseba Amunarriz volverá a enfundarse el maillot de líder que tantas semanas lució en la pasada campaña: "No estaría nada mal empezar igual. Sí es cierto que vamos con mucha ilusión, lo que pasa es que creo que este año, siguiendo la tónica de las últimas temporadas, vamos a tener rivales muy fuertes. No hay que tener miedo a nadie, pero hay que respetar mucho a todos. Cada año se nota que en todas las traineras están haciendo bien las cosas y nos encontramos más rivales y más fuertes". Por muy cauto y comedido que quiera ser Orbañanos en sus declaraciones, nadie duda de que Hondarribia es la gran baza guipuzcoana para ganar la Liga.