El desafío de la bombona

EL pequeño municipio de Mendaro acogerá el próximo sábado día 26 de enero un atípico desafío que ha levantado una gran expectación en las localidades de Debabarrena y del valle del Urola.

Los mendarotarras Jurdan Ezenarro, Andoni Zubiaurre Gorixo y Unai Salegi Sarobe son los cocineros que se han encargado de preparar todo el guisado, que se servirá condimentado con un buen puñado de ingredientes.

Un recorrido de 4,6 kilómetros en continua linea ascendente, con un desnivel de 500 metros entre los puntos de salida y de llegada (con unas pendientes que alcanzan porcentajes de hasta el 30% en la parte final) y tres bombonas de butano repletas de gas (de 26 kilogramos cada una) son algunos de los principales componentes de lo que ya se ha bautizado como el desafío de la bombona.

La peculiar prueba, que arrancará a las 11.30 horas desde la Herriko Plaza de Mendaro, consistirá en llegar lo antes posible al enclave en el que está situada la sociedad Lizarpe, encima del monte Alkorta.

Todo ello, con la particularidad de que cada uno de los tres contendientes deberá completar el exigente recorrido acordado (con una pendiente media del 10%) llevando una bombona de butano "a la espalda, en el hombro, encima de la cabeza o como cada cual considere oportuno".

Para ello "durante la prueba no se podrá llevar ropa acolchada ni faja, pero sí guantes "porque si hace frío o llueve las manos se pueden quedar congeladas al estar en continuo contacto con el metal de la bombona".

Además, cada contendiente deberá pesar su bombona antes de tomar la salida y al traspasar la línea de llegada; "no sea que a alguno se le ocurra intentar subir más rápido quitando gas durante la ascensión", avisan entre risas.

Como premio al esfuerzo realizado, el ganador del desafío disfrutará de una suculenta comida en el restaurante Landa de Mendaro; lógicamente, a costa de los perdedores, que también compartirán mesa con el vencedor.

Sea como fuere, NOTICIAS DE GIPUZKOA se reunió ayer con los protagonistas del desafío para conocer cómo están preparando la prueba y sus sensaciones ante un evento que ha generado un revuelo considerable; no solo en su localidad, sino también en varios municipios del entorno.

Los tres 'locos'

Convencidos de que pueden bajar de los 50 minutos

Con 26 años, 78 kilos de peso y 1,79 metros de altura, Andoni Zubiaurre Gorixo es el más joven de los tres hombres que participarán en el desafío del próximo sábado.

Dedicado a labores de mantenimiento en una empresa de mecánica, Gorixo hace siete años que empezó a practicar en su tiempo libre diferentes modalidades de deporte rural como txingas, trontza o sokatira; aunque a nivel competitivo "casi siempre he participado formando parte de un equipo", puntualiza.

A pesar de su juventud, Andoni Zubiaurre es el principal favorito para sus dos rivales; si bien él no tiene dudas de que Unai Salegi, el más veterano de los tres, es el que cuenta con un mayor número de papeletas para hacerse con la victoria.

Por su parte, el propio Unai Salegi Sarobe (40 años, 90 kilos de peso y 1,78 metros de altura) lleva practicando diferentes disciplinas de deporte rural (levantamiento de piedra, trontza, aizkora...) desde que era un adolescente.

Para este hombre, que trabaja en la limpieza y el cuidado de montes, "el rival a batir es Gorixo". Y eso, a pesar de que él es el único de los tres contendientes que ha realizado previamente un desafío que, según recuerda, "consistió en una carrera a pie y después en cortar unos troncos, por lo que no tiene nada que ver con lo que tenemos ahora entre manos".

A priori, Jurdan Ezenarro (31 años, 76 kilos y 1,84 metros de altura) es el más flojo de los tres contendientes; aunque sus rivales no se fían "ni un pelo" del nivel que pueda demostrar este joven que desarrolla labores de montaje en una carpintería y que años atrás practicó ciclismo y fútbol; si bien en los últimos tiempos se ha decantado por participar en pruebas de atletismo y en carreras de montaña.

Durante las últimas semanas, los tres locos que participarán en el desafío han realizado diferentes entrenamientos para preparar la cita del próximo sábado. Cada uno lo ha hecho "a su manera" y contando con su propio botillero o ayudante. Eso sí, los tres coinciden al esconder sus cartas y al señalar que la prueba "se puede completar en menos de 50 minutos".

En cualquier caso, Gorixo reconoce que hasta la fecha ha salido a entrenar "unas diez veces" por el recorrido que enlazan las 18 curvas existentes en la subida a Lizarpe; mientras que Jurdan ha hecho lo propio "cinco días" y Sarobe asegura haber entrenado para el desafío apenas en tres ocasiones.

La expectación

Todo el pueblo pendiente

La ciudadanía de Mendaro está expectante ante el inminente desenlace del desafío de la bombona.

Tras tomar el pulso a los mendarotarras, parece claro que la mayoría ve como vencedor a Gorixo; aunque también son muchos los que señalan a Sarobe como el principal candidato a la victoria.

En un principio, los ciudadanos no contemplan la posibilidad de un triunfo de Jurdan Ezenarro, "más que nada porque prácticamente nadie conoce su faceta competitiva", explican sus oponentes.

Los tres reconocen que sus familiares y allegados les han preguntado "si estamos locos o se nos ha ido la cabeza para hacer esto" pero también se han encontrado con quienes aplauden su valentía "porque dicen que contribuimos a mantener viva una de las viejas tradiciones de Euskal Herria".

De todos modos, los protagonistas del evento invitan al conjunto de la ciudadanía local y a todos los amantes del deporte rural del territorio para que acudan a las rampas de la subida a Lizarpe a animarles. En este sentido, cabe señalar que en la carretera ya pueden verse algunas pintadas de apoyo a Gorixo, curiosamente, dibujadas por su rival Jurdan.

Eso sí, los tres recuerdan que la carretera se cortará a las 11.00 horas para evitar problemas con los coches.

Al inicio de la prueba se lanzarán tres cohetes y otro más cuando cada uno de los contendientes atraviese la linea de llegada.