"Samuel es capaz de ganar la Vuelta"
González de Galdeano asegura que el asturiano, como su equipo, llega en un "buen momento" a una carrera que "se adapta muy bien a él: es nuestra única baza"
"SAMUEL llega en un gran momento a la Vuelta al País Vasco, que es nuestro primer gran objetivo del año y una carrera que se adapta muy bien a él, que además le hace especial ilusión y está capacitado para ganarla. Otra cosa es que lo consiga", opina Igor González de Galdeano.
Para ello, el mánager naranja ha protegido al asturiano con "el mejor equipo que tenemos", teniendo en cuenta que "otros ciclistas, como Gorka Izagirre o Jonathan Castroviejo, con sus actuaciones, también se han ganado la posibilidad de estar aquí, pero están de reservas y tienen otros objetivos por delante también importantes".
Iván Velasco, Juanjo Oroz, Egoi Martínez, Gorka Verdugo, Pablo Urtasun, Amets Txurruka e Iñaki Isasi serán los siete escuderos del asturiano, una vez descartado Romain Sicard. El de Hazparne "se tuvo que retirar de la París-Niza por unos problemas en una rodilla", y en la Volta no demostró el golpe de pedal suficiente como para estar el lunes en la salida de Zumarraga.
Galdeano sabe que "Samuel es nuestra única baza para la general", y no se guarda ningún as en la manga, como el que terminó jugando en la pasada edición con Beñat Intxausti, que se aupó al tercer puesto después de que el ovetense quedara descartado el primer día. "Beñat fue una sorpresa, que hizo una gran Vuelta al País Vasco, pero entonces, como ahora, Samuel era nuestra única apuesta", asegura Galdeano.
El gasteiztarra se sabe al dedillo el trazado que se va a encontrar la próxima semana. Lo único que no conocía, que lo supervisó la pasada semana con sus hombres, es el muro de La Antigua, tras un vericueto de ascensiones explosivas como Minas, Barbaris o Gabiria.
Un recorrido "típico"
"Al estilo italiano"
"A mí siempre me gusta el recorrido típico de la Vuelta al País Vasco, como sucede este año. El primer día es muy complicado, y casi lo serán más las bajadas que las subidas, y no digo nada si encima llueve", pero estima que Samuel puede salir fortalecido de las rampas al 20% de desnivel de La Antigua, para las que Euskaltel-Euskadi no prevé un cambio de multiplicaciones: "No somos un equipo de fuerza, y solemos ir con desarrollos altos, y habitualmente llevamos un piñón de 27 dientes".
Después de esa primera jornada de "gran tensión", se sucederán etapas "con finales complicados, al estilo italiano. En Murgia tendremos Altube, que no debería decidir mucho; en Lekunberri, Azpiroz, luego Arrate... No son como para abrir muchas diferencias, pero sí para estar atentos porque al menor descuido te quedas cortado. El espectador no se va a aburrir".
Y dado ese goteo de segundos que prevé, el mánager de Euskaltel-Euskadi no anticipa un desenlace antes de la contrarreloj. "En el ciclismo actual, las cronos deciden muchas carreras. En País Vasco no será diferente, pero no será una contrarreloj como antes, a la que llegaban veinte ciclistas con opciones, como pasó con Marchante, que iba algo así como el quince en la general y se llevó la vuelta. Este año creo que solo habrá unos cinco para pelear por el triunfo", y ahí ve a Samu.
Intuye que, como otros años, su equipo deba tomar las riendas del pelotón en muchos momentos de carrera. "Con un corredor como Samuel y corriendo en casa, es normal. No me preocupa. El año pasado ya lo supimos hacer en muchas carreras, y este año no vamos como segundo plato, sino como primero, lo que nos obligará a tomar responsabilidades para defender a Samuel".