madrid/pamplona. La Guardia Civil detuvo ayer a una docena de personas por su relación con una red de dopaje en el deporte asentada en las provincias de Barcelona, Valencia, Murcia y Granada, en una operación en la que también está implicado el atleta granadino Paquillo Fernández, subcampeón olímpico de marcha en Atenas 2004.

Según fuentes de la investigación, Paquillo Fernández, de 32 años, no fue detenido en la operación, aunque sí estaba relacionado con la red de dopaje, que distribuía EPO y diversas hormonas del crecimiento.

Paquillo es uno de los grandes abanderados de la marcha española, con un palmarés que incluye la plata olímpica en Atenas 2004, dos Copas del Mundo, dos europeos y tres platas mundiales.

En un comunicado, Paquillo Fernández señaló que "nunca" ha tenido "nada que ver con el dopaje", además de negar cualquier relación con el médico peruano Walter Viru, detenido ayer en Valencia. El atleta agrega que se encuentra "tranquilo" y a la espera de los resultados de la citada investigación.

Su representante, Alberto Armas, dijo que él y Paquillo se encuentran "sorprendidos" por la implicación, pero al mismo tiempo "tranquilos, al tener la conciencia limpia".

"No tenemos ninguna información oficial al respecto, tan sólo las que han llegado de los medios. Estamos sorprendidos de esta noticia, pues no está implicado Paquillo en nada similar", dijo Armas.

En la operación, el instituto armado practicó catorce registros en domicilios, farmacias y en la clínica valenciana del doctor Viru, ex médico del equipo ciclista Kelme, en la que encontró sustancias dopantes y documentación que prueba la implicación de los diversos investigados con la red.

Walter Virú estuvo imputado en el caso Jesús Manzano, derivado de las declaraciones de este ex ciclista, que denunció una trama de consumo y tráfico de sustancias dopantes en ese deporte. El caso fue sobreseído el 9 de febrero de 2005.

"Lógicamente, Paquillo está preocupado por la noticia ya que, pese a saber que es inocente, esto le supone un deterioro en su imagen, pues la noticia de su presunta implicación salta al ámbito internacional. Nosotros nos ponemos a disposición de los jueces para demostrar su inocencia y acudiremos a donde nos digan. Deseamos que lo antes posible se aclaren las cosas", dijo Armas.

Las mismas fuentes confirmaron que entre la docena de detenidos hay al menos dos farmacéuticos que dispensaban las sustancias prohibidas y varios médicos que controlaban a los deportistas. La operación sigue abierta y no se descartan más detenciones o registros.

ensuciado el nombre de chente Chente García Acosta se llevó un tremendo disgusto, a la vez que enfado, cuando, mientras bañaba y daba de cenar a sus hijos, empezó a sonar el teléfono y los periodistas le preguntaron si estaba implicado en la red de dopaje. Y es que As había publicado en su web que "también podrían haberse producido registros en el domicilio del ciclista Chente García Acosta". Indignado, telefoneó al periodista, que le dijo que su nombre se lo había dicho una fuente. El navarro habló también con Eusebio Unzué y ambos decidieron entonces demandar al periodista. "Es una vergüenza. Es muy fuerte. No tengo ni idea de esto. Estoy alucinado. Esto es alguien que quiere ensuciar mi nombre. No saben qué daño hacen con esto; es una putada", decía Chente.

Minutos después el periodista confirmó a Chente que su nombre no había salido en ningún momento de fuentes policiales y la web del diario eliminó la información del navarro.

As aseguraba también que se registró el domicilio del ciclista paralímpico Javier Otxoa.