El cine infantil y los blockbusters arrasaron en la taquilla vasca durante 2024, que vivió un descenso de asistentes de un 6% con respecto al ejercicio anterior. Solo dos películas producidas en el Estado se colaron en el ranking de los más visto del año: La infiltrada, dirigida por la bilbaina Arantxa Echevarría, se posicionó en el sexto puesto (esto supone descender cuatro posiciones en comparación con las cifras a nivel estatal), mientras que la última entrega de la receta familiar de Santiago Segura, Padre no hay más que uno 4, se situó en décima posición. La Asociación de Salas de Cine de Euskadi, EZAE, ha hecho balance este jueves de lo que fue 2024, un año marcado por un descenso de la asistencia a salas. Si en 2023 la taquilla registró una asistencia de 3,64 millones de espectadores, 2024 recibió 3,42 millones. Es decir, un 6% menos.
El cine infantil de animación producido en Hollywood ha sido el más visto por la sociedad vasca. De hecho, muchos de los largometrajes pertenecen a sagas cinematográficas con solera. En primera posición del Top-10 se encuentra Del revés 2, de Kelsey Mann y producida por Pixar, ha sido la película con más espectadores. En cuarta posición se ha colado Gru 4, mi villano favorito, desarrollada por Illumination, mientras que Vaiana 2, de Disney, estrenada el 29 de noviembre, ha conseguido en apenas un mes situarse en quinta posición. La nueva historia del oso panda shaolín llamado Po, Kung Fu Panda 4, ha sido la octava cinta más vista. Por último, Robot Salvaje, una de las cintas de animación más celebradas del año pasado y que pudo verse en el último Zinemaldia, se ha situado detrás de Kung Fu Panda 4.
La lista de lo más visto en Euskadi se completa con tres blockbusters, también pertenecientes a sagas consolidadas. La divertida e irreverente Deadpool y Lobezno, del universo cinematográfico Marvel, ha logrado la plata y el bronce ha ido a parar a la segunda parte de Gladiator, el peplum de Ridley Scott. La yihad galáctica de Denis Villeneuve, Dune: parte dos, por su parte, se colocó en el puesto siete del ranking.
Crecimiento y decrecimiento
La taquilla vasca ha sufrido un retroceso en sus espectadores, tras dos años de crecimiento continuado tras la pandemia.
La curva de descenso de espectadores, ha explicado la EZAE a partir de datos de la consultora Comscore, fue más empinada durante el primer semestre de 2024. A fecha de 30 de junio, la caída era de un 13%, con lo que fue el segundo semestre el que salvó los muebles.
Aunque las cifras de público han descendido un 6%, no lo han hecho así las de recaudación, que solo han bajado un 1% porciento. Más en detalle, en 2023 los cines de la CAV ingresaron 23,704 millones de euros, mientras que en el ejercicio anterior el importe fue de 23,366 millones.
Desde la asociación de salas de proyección apuntan hacia varios factores, internos y externos, posibles como vía para explicar el “estancamiento” del sector. Por un lado, se encuentra la huelga de guionistas y actores de EEUU que, pese a ser un hecho de 2023, provocó el retraso de potentes blockbusters hasta 2025.
Por otro lado, el cine vasco, que en el pasado movió a gran cantidad de ciudadanos a las salas con estrenos potentes como Irati o 30.000 especies de abejas, se vio huérfano en 2024 de algún estreno reseñable.