El centro cultural Larrotxene ha sido cantera de un buen número de cineastas como pueden ser Borja Cobeaga, Luis A. Berdejo y Pablo Malo. Bajo el sello de Larrotxene Bideo, ofrece cursos sobre las distintas vertientes del cine, además de ofrecer asesoría para proyectos audiovisuales y prestar material para llevar a cabo las grabaciones. Uno de esos hijos de Larrotxene es Paco Arasanz. Madrileño de nacimiento, este creador reside ahora en Almería, pero ha vivido en México y Donostia, donde entabló relación con el centro cultural situado en Intxaurrondo, que ahora se ha involucrado en su primer largometraje: Obayifo 2.

Entre otros proyectos, Arasanz es el director de dos cortos, Puertas (2016) y Supervivere (2017), que, además de recibir numerosos premios en distintos festivales, lograron entrar en el catálogo de Amazon Primer Video, un éxito notable en un género con un público más reducido. “Cuando grabé estos dos cortos vivía en Donostia. Vine en 2011 y unos años después hice un curso de dirección en Larrotxene con Pablo Malo. Yo ya estaba metido en este mundo en México, pero hice el curso para, de alguna manera, reciclarme y entrar en el círculo cinematográfico. El corto Puertas lo hice con la gente de Larrotxene, y para Supervivere también conté con ellos. Además, me dieron el material y me ayudaron en la postproducción”, cuenta: “La ayuda que te dan es grande. Aportan conocimiento y mucho apoyo. Vas con un proyecto y te consiguen personal, te prestan el equipo...”.

México, Donostia y Almería

Arasanz vivió alrededor de diez años en Donostia, de donde es su mujer y donde han nacido sus dos hijas, así que su vínculo con la capital guipuzcoana es “muy grande”. Antes vivió en México y desde el año pasado reside en Almería. “En México ya hice algo de cine, pero sobre todo escribí guiones para televisión, como una microserie de ficción titulada Preguntas que matan. También colaboré con gente que hacía telenovelas y documentales”.

Luego llegó su citada época en Donostia –donde creó esos dos cortos que tuvieron “muy buen recorrido” pese a ser un género “incierto y que comercialmente no da dinero”– y fue en Almería donde decidió dar un paso más y lanzarse al mundo del largometraje. “Decidí retomar los contactos que ya tenía en México, fui allí en marzo del año pasado, y en ese proceso escribí la película Obayifo 2. Pensé en producir algo de terror, con un toque experimental e involucrar a España y México. Además, Almería es un lugar que tiene una mezcla cultural potente y me interesé por los ritos africanos”.

Un mito africano

El creador madrileño con vínculos donostiarras se basó “en un mito de un grupo de cineastas de Ghana que intentaron hacer una invocación”. El título viene de Obayifo, que es un “espíritu vampírico de la cultura ghanesa”. Arasanz no quiere desvelar muchos aspectos de su primer largometraje, pero da algunas pinceladas: “Los protagonistas hacen un ritual y la cosa no va como debería. Digamos que se les hace demasiado real”.

Obayifo 2 es una road movie rodada en Burgos, Madrid, Toledo y Almería, incluyendo lugares míticos como Fort Bravo, donde, por ejemplo, se rodó la película El bueno, el feo y el malo. “Es mi localización preferida por la historia que tiene, pero también me gustan los invernaderos, que dan mucho miedo”. Cuenta también Arasanz que quería actores “que supieran manejar la cámara” porque “algunas escenas son cámara en mano, así que las graba el propio actor. He querido experimentar. En este tipo de películas el modelo típico es La bruja de Blair, pero hay muchas películas parecidas. Quería que fuera muy inmersiva, lo más real posible”.

El madrileño se muestra “satisfecho” de la grabación: “Ha quedado mejor de lo que esperaba. Tenía mis reservas porque hay partes que eran improvisadas, escenas grabadas sobre la marcha y de noche... Pero ha funcionado muy bien”. Además de la citada colaboración de Larrotxene Bideo, con la que Arasanz está ahora inmerso en la fase de postproducción de la cinta, el sello donostiarra lo ponen también Eva Rodríguez y Mikel Cortés, un equipo de arte “que ha funcionado muy bien y ha hecho un trabajo súper bueno dentro de las circunstancias de la película, que tiene un presupuesto bajo y ha sido grabada en pocos días”.

Los protagonistas de la cinta son los actores y actrices Sergio María, Luciano Ciaglia, María Monroy, Favour Davison y Sibérou Sar. Destaca también el director que el encargado del maquillaje de efectos especiales es el “prestigioso” Pedro de Diego.

Comenta Arasanz que la diferencia entre este trabajo y filmar cortos es que un largometraje es “mucho más intenso, dura más días y tienes más responsabilidad porque hay más escenas. Por suerte, en Obayifo 2 ha habido un grupo humano que ha funcionado muy bien”.

El “nicho” del terror

La idea del madrileño es acabar en unos meses la postproducción y a mediados de año distribuir su primer largometraje “en festivales y plataformas”: “En principio en México, gracias a Héctor Rodríguez, coproductor de la película, no habrá problema en que se vea en un par de plataformas, pero queremos dar el salto a España, es posible que lo hagamos como producción hispano-mexicana”. El terror es un género “que funciona muy bien en plataforma y que tiene demanda, pero también hay mucha oferta”. Lo más importante, al fin y al cabo, es que “a la gente le guste”, aunque insiste en que él se encuentra “satisfecho con el resultado a falta de ver todo acabado tras la postproducción”.

Su primer largometraje no será el último, ya que tiene otro proyecto en perspectiva: “Trabajaré de nuevo con Héctor Rodríguez. Queremos hace una adaptación de Yerma, la obra de Federico García Lorca, al terror. Creo que a finales de este año nos pondremos a ello”.