El grupo de danza contemporánea Osa + Mujika vuelve este domingo 29 al teatro Gazteszena del barrio donostiarra de Egia con Abundance, una obra con la que pretenden explorar el deseo en la sociedad actual y “derribar ese amor que tiene como fin la posesión, la exclusividad, los celos y, por qué no, la fidelidad”.

Osa + Mujika es el “encuentro artístico” entre Jaiotz Osa, bailarín, y Xabier Mujika, escenógrafo y diseñador de vestuario. El proyecto nace en 2017, aunque “habíamos coincidido en otros proyectos” cuenta Osa a este periódico. “Veíamos que teníamos un mismo enfoque y las mismas maneras con las que queríamos indagar en el mundo de la danza”, rememora. Así, cuando Osa empieza a crear la obra Suddenly y Mujika le empieza a ayudar, se da cuenta “que no estaba solo en el camino; los dos teníamos muchas ganas de seguir trabajando juntos. Así empezó”.

Su nueva obra, Abundance, es una pieza de danza contemporánea de 55 minutos, llevada a cabo por cinco intérpretes, en la que tratan las relaciones monógamas y el tipo de amor que se refleja en la sociedad. Al igual que consideran que el tipo de familias aceptadas está cambiando, también perciben que “siempre se habla de la misma manera cuando se habla de la fidelidad” y que “en todas las películas, siempre hay una princesa y un príncipe”; unos códigos “que todos teníamos”. Por ello, con esta obra quieren “derribar ese romanticismo tóxico en el que todavía todos estamos anclados”.

Esta no es la única pieza con base en temas alejados del status quo. Todos sus trabajos “nacen de inquietudes que tenemos, de problemas sociales o de cosas que vemos en el día a día”. Así, previamente, estos dos artistas de 35 años han tratado cuestiones que “para nuestra generación son muy importantes”, como la crisis en los millenials. “Creo que son problemas que sí están en la calle, pero muchas veces no en un teatro. Y nosotros intentamos llevarlos”, incide Osa.

En cuanto a la puesta en escena de Abundance, “desde el principio, Xabier y yo hemos trabajado juntos” para que tanto la estética como la danza vayan de la mano. Y es que la parte visual “está muy trabajada” y es “muy impactante, muy colorida”, pero sin perder la sintonía con el movimiento. Elementos estéticos que esta obra tiene en común con piezas previas; “hemos creado una manera de contar y todos nuestros trabajos tienen ciertas características que se repiten”, explica Osa; “es como un sello”.

Como novedad, se escuchará música original, compuesta específicamente para este espectáculo. Así, la “atmósfera musical” ha formado parte del proceso de creación, junto a otros elementos como el vestuario o la escenografía.

Esta no es la primera pieza de larga duración de Osa + Mujika. Viene precedida por Suddenly III, que estrenaron en febrero de 2018, también en Gazteszena; Kenophobia, una obra de 50 minutos que vio la luz en noviembre de 2019 y fue seleccionada para el circuito Danza a Escena 2021; y Loser, creada en 2020 en colaboración con Azkuna Zentroa de Bilbao y Dansateliers Rotterdam.

Sin embargo, también han dado forma a obras más cortas; entre ellas, el solo Suddenly y el dúo Expectations will not kill you, ambas de 13 minutos de duración y desarrolladas para la puesta en escena en “espacios no convencionales”.

Ambos formatos distan entre sí, pero Osa tiene claro al mostrar su preferencia por el de larga duración. “Para nosotros, lo más satisfactorio es hacer una obra así, de una hora. Porque, al final, te da tiempo a desarrollar una idea y matizar en detalles, además de trabajar la música, los tiempos, diferentes escenas o el vestuario”, argumenta.

El estreno de este domingo en Gazteszena lo hacen en un entorno conocido, ya que han estrenado todas sus piezas de larga duración allí. Osa subraya que “nos apoyan muchísimo en ese teatro”; pero no únicamente a su grupo, sino a “muchos creadores” del sector de la danza contemporánea que hacen su primera función allí. “Para nosotros es muy especial y estamos súper agradecidos porque, una vez más, han confiado en nuestro trabajo”.

Más allá de la escenificación en Gazteszena, no tienen aún otras funciones cerradas con esta obra. Tras el estreno, comenzará el proceso de distribución, en el que harán llegar la grabación de la pieza y el dossier artístico; “ojalá salga gira y salgan funciones; haremos todo lo posible”, afirma Osa. Eso sí, tienen algunos espectáculos cerrados en relación a sus obras previas.

De cara al futuro, el trabajo no para . “Siempre hay cosas en la cabeza”, reconoce Osa. Hay que tener en cuenta que este tipo de creaciones funcionan con ayudas de Eusko Jaurlaritza, como recuerda este artista y que, en el caso de la obra que van a estrenar, la subvención se recibió hace más de un año. Por tanto, “hay que empezar a mover la maquinaria mucho antes”, apunta el bailarín. Eso sí, lo dejarán para después del domingo; “antes de una semana del estreno, la cabeza, el cuerpo y todo funcionan solamente para eso”.