Si Indiana Jones se pasase por Gipuzkoa en alguna de sus aventuras, muy probablemente visitaría Gordailua. El Centro de Colecciones Patrimoniales de la Diputación cuenta con casi 200.000 piezas de todo tipo, desde cuadros y esculturas hasta trajes, muebles y restos fósiles, que no solo resguarda de su mayor archienemigo, la humedad, sino que también restaura y estudia. Ahora, con motivo del décimo aniversario de su creación, este "backstage de los museos" busca impulsar su lado más social y pedagógico a través de visitas guiadas y nuevas colaboraciones con otros espacios del territorio.
En sus diez años de vida, Gordailua ha conseguido reunir bajo sus 9.000 metros cuadrados de instalaciones en Irun casi 200.000 piezas, de la que la mayoría, 120.000, se corresponden a objetos arqueológicos, y el resto, más de 70.000, son piezas de origen etnográfico y artístico. Una colección que incluye desde obras de Nestor Basterretxea y Ruiz Alberdi a cuadros y dibujos de Carlos Sanz o los restos del conocido león cavernario de Arrikrutz.
"Se ha convertido en un centro referencial para Europa y ahora el reto es divulgar y llegar a la sociedad", ha explicado esta mañana el diputado de Cultura, Harkaitz Millán, acompañado por la directora de Cultura, Mari José Telleria. en la presentación de las diferentes actividades que se llevaran a cabo para conmemorar su décimo aniversario.
No todo el patrimonio que alberga en su interior es propiedad de la Diputación, ya que Gordailua se ha convertido en la principal referencia para el análisis, la investigación, la restauración y, sobre todo, la conservación de gran parte del legado e historia de Gipuzkoa. Es habitual que investigadores, no solo del territorio, utilicen estas instalaciones para el inventario de diferentes piezas, así como que diferentes entidades como el Museo San Telmo o la Fundación Kutxa se valgan de ellas para conservar en mejores condiciones sus obras. "Que estén todas en un mismo lugar favorece la sostenibilidad y mejora su estado al estar todos los recursos juntos", ha apuntado la directora.
No obstante, a pesar del buen hacer en cuanto a investigación y conservación, el centro "había dejado de lado su función social" que, ahora, con motivo de los diez años, el Ente foral busca recuperar a través de nuevas iniciativas.
Por un lado, la Diputación ha puesto en marcha Gordailua Zabalik, gracias a la que se podrá visitar el centro y conocer de primera mano sus entresijos y secretos. Aunque ya estaban en marcha unas visitas guiadas mensuales, la oferta ahora será quincenal, con la posibilidad de realizarla tanto en euskera como en castellano, y dividida en dos propuestas: una visita para descubrir las obras protegidas y otra para conocer el proceso de trabajo y de restauración que se lleva a cabo allí. Para poder participar, es necesario inscribirse previamente a través de la página web del centro.
Además, se podrán a disposición una serie de códigos QR con los que será posible visitar Gordailua de forma virtual. Cada uno de estos códigos explicará cada pieza y el proceso de restauración que ha tenido.
Por otro lado, Gordailua Lurraldean expandirá el trabajo del centro a nuevos espacios del territorio como el Museo de Máquina Herramienta de Elgoibar, con el que se restaurarán objetos del patrimonio industrial, o el Convento de Santa Teresa, donde se podrán exponer objetos que tengan algún tipo de relación con la arquitectura.
Asimismo, se estudiarán nuevos espacios susceptibles de albergar muestras, se llevará a cabo una actualización del inventario de antiguas excavaciones arqueológicas y se revisarán los objetos patrimoniales de diferentes equipamientos como el Photomuseum, la Torre Legazpi o el Parketxe de Zegama.