acar adelante un cortometraje es muy complicado, pero pocas veces se habla de lo difícil que es también darle visibilidad. Una vez que recorren el circuito de festivales y son exhibidos, la mayoría quedan colgados "en el limbo de YouTube". El madrileño afincado en Donostia Paco Arasanz ha conseguido lo impensable: colar dos de sus cortometrajes producidos en Larrotxene Bideo en el catálogo de Amazon Prime Video. "Al no haber parrilla de televisión, se ha roto la duración de los tiempos. Es una oportunidad para los creadores", comenta.

Con la llegada de las plataformas de streaming, el mercado y el panorama del audiovisual ha cambiado por completo. Las series de televisión han reducido su metraje y son casi más atractivas que las películas, los productores se arriesgan cada vez más con historias complejas y los usuarios son más receptivos a nuevas fórmulas de entretenimiento. En esa realidad, los cortometrajes tratan de buscar su hueco.

"Es dificilísimo distribuir un cortometraje en el Estado. Para poder entrar en una plataforma hay que contar con un distribuidor directo que ya trabaje con ellos", cuenta Arasanz, uno de los pocos cineastas que ha derribado la puerta de Amazon, en cuyo catálogo el número de producciones de este tipo no llega a la decena; él ha conseguido introducir dos, Supervivere y Puertas.

Lo ha hecho además dando un rodeo internacional, gracias a los contactos que tenía en México, dónde trabajó antes de instalarse en la capital guipuzcoana. Sus socios aztecas le ofrecieron distribuir sus dos últimos trabajos en toda América Latina, España, Reino Unido y Estados Unidos. Una ventana de exhibición que no podía rechazar. "Que los cortometrajes tengan un recorrido en festivales seguramente fue algo que les hizo quererlos. Para ellos es importante tener un sello de calidad", explica este director que presentó Supervivere en el Zinemaldia antes de recibir más de 30 premios internacionales con él; y Puertas en el Festival de Cine de Errenteria, además de viajar por numerosos certámenes más.

Ambos trabajos han contado con la producción de Larrotxene Bideo, toda una cantera de cineastas bajo el sello de Donostia Kultura. "Te ayudan en todo, te gestionan el equipo, el reparto... es gente que está para apoyar a la cultura. Les estoy muy agradecido", elogia este creador a un espacio que ha servido de altavoz para Borja Cobeaga, Luiso Berdejo y Pablo Malo, entre otros cineastas.

La presencia de estos dos cortometrajes en una de las principales plataformas internacionales de vídeo bajo demanda responde al nuevo modelo de negocio. "El streaming ha difuminado las fronteras de las duraciones. El primer ejemplo de ello fue que las series españolas antes duraban hora y media y ahora las hay de 40 y hasta 20 minutos. Eso juega a favor de otros modelos", cuenta Arasanz.

Ante esta tesitura, el cineasta madrileño trata de continuar su alianza con Amazon con una microserie de capítulos de entre uno y dos minutos: "Al no haber una parrilla de televisión, se ha roto la duración de los tiempos. Es una oportunidad para los creadores".

Gracias a ello, los cortometrajes quizás puedan prorrogar su esperanza de vida. Hasta ahora, estos trabajos sufrían "un olvido después de los festivales", sin un lugar donde continuar su exhibición más allá "del limbo" que es YouTube. Ejemplos como los pocos trabajos que se han introducido en el servicio de la compañía estadounidense y sobre todo del servicio Filmin, que con un apoyo online a los principales festivales de esta categoría no teme llenar su catálogo con ellos, la realidad parece ser otra.

Sin embargo, ¿están realmente los usuarios interesados en encender la televisión, abrir la aplicación y decidir ver un cortometraje entre una infinita selección de películas y series? "Está claro que la gente que sea afín a ellos estará más interesada, pero creo que nuestra forma de consumir ya es diferente y más flexible", explica el cineasta, que pone como ejemplo los GIFs: "Son solo tres segundos y los vemos perfectamente. Es algo que hace unos años no habríamos pensado".De este modo, quizás los dos cortometrajes de Arasanz no sean los únicos de Larrotxene Bideo que acaben dentro del catálogo del gigante americano.

"Para poder entrar en una plataforma hay que contar con un distribuidor que ya trabaje con ellos"

"El 'streaming' ha difuminado las fronteras de las duraciones. El consumo es más flexible"

Director de 'Supervivere' y 'Puertas'