s uno de los pulmones verdes de Tolosa y un espacio que ahora es visitable. Hace unas semanas que el Ayuntamiento de esta localidad ha abierto al público el parque Elosegi, con el fin de ofrecer nuevos espacios de ocio y disfrute de la naturaleza a la ciudadanía. Sus cuevas artificiales, su estanque, sus manantiales de fuentes, su colección de árboles y animales, y un mirador con las mejores vistas de Tolosa hacen que sea una visita obligada este verano.

Elosegi era originariamente un parque privado del siglo XIX, perteneciente a la familia Elósegui, que posteriormente fue adquirido y convertido en público por el Ayuntamiento. Se trata de un espacio natural de 26.720 metros cuadrados que se encuentra en la zona de transición entre el núcleo urbano y el monte, lo que define plenamente el carácter del parque: cumple la función de un monte forestal natural situado en el propio pueblo y es un espacio importante para fomentar la biodiversidad urbana de la localidad.

El parque Elosegi es un pequeño bosque de cedros, cipreses, robles, hayas y tilos, refugio de garzas, murciélagos, anfibios e insectos. Se pueden encontrar también troncos de árboles muertos. Están abandonados intencionadamente, ya que además de dar al parque la forma de bosque urbano, son un ecosistema muy importante para hongos, descomponedores y como guarida de animales.

De modo que se trata de un importante centro de biodiversidad que ahora solo se puede visitar mediante visitas guiadas o en acciones y actividades concretas. Está abierto en horario de 8.30 a 21.00 horas. Los días de fuerte viento el parque permanece cerrado por seguridad. Asimismo, está prohibido circular fuera del camino del parque para garantizar la seguridad de las y los asistentes.

Además de las labores de mantenimiento y renovación que se realizan a lo largo de todo el año, en las últimas semanas se han retirado varios árboles que se encontraban en la zona del vial interior del parque y que podían generar peligro, y también se han renovado algunas vallas. Después de mucho tiempo acometiendo actuaciones para mejorar la seguridad, hacer de él un espacio visitable, construir el mirador y retirar árboles enfermos, ha abierto sus puertas. Es un lugar ideal tanto para pasear como para disfrutar de su entorno, pero no hay que olvidar que tiene una pendiente del 60%.

A lo largo del año se están organizando diversas actividades en el parque Elosegi, lo cual ha demostrado las posibilidades que posee el entorno. En los últimos tiempos, el Ayuntamiento está tratando de promocionar el parque como espacio de fomento de la biodiversidad urbana, priorizando las oportunidades de educación e investigación ambiental.

En este sentido, se realizan dinámicas como la Baso Eskola de la mano de los centros escolares de Tolosa. Gracias a este proyecto las y los niños pueden trabajar directamente la relación con la naturaleza en el propio municipio. El parque también ha tenido su importancia en la labor que se realiza con los centros escolares en torno al Día del Árbol, cuando las y los alumnos plantaron árboles hace dos años.

En colaboración con Aranzadi Zientzia Elkartea, también se estableció un comedor para aves en el parque para impulsar la observación e identificación de aves. Del mismo modo, también se han organizado sesiones de anillamiento de aves, también junto a Aranzadi.

El parque Elosegi, que luce espléndido este verano, también se ha convertido en escenario de la mitología, los ancestros y la magia, ya que estos dos últimos años se ha llevado a cabo en Navidad el proyecto Olentzaroren Basoa junto a la asociación Zumardia.