De Rubens a Van Dyck
la pintura flamenca llega al museo goya de zaragoza con una colección privada que estará hasta febrero
Cuarenta y dos obras, entre pinturas y grabados, de algunos de los mejores maestros de la escuela flamenca entre los siglos XV y XVIII, entre ellos Rubens o Van Dyck, centran la nueva y colorida exposición que alberga el Museo Goya de Zaragoza hasta el próximo 16 de febrero de 2020 procedentes de la colección Gerstenmaier.
La muestra De Rubens a Van Dyck. La pintura flamenca en la Colección Gerstenmaier, que presentó ayer la Fundación Ibercaja, contiene trabajos de dos de sus máximos exponentes, pero también de un buen número de artistas reconocidos como Hendrick Goltzius, Jan Brueghel el Viejo, Joost de Momper el Joven, Martin de Vos, Jan Brueghel de Velours, Jan Van Kessel el Viejo, o Gaspar Pieter Verbruggen, entre otros. El director general de la Fundación Ibercaja, José Luis Rodrigo, presentó esta exposición junto a la comisaria, Marisa Oropesa, la directora del Museo Goya, Rosario Añaños, y el propietario de la colección, Hans Rudolph Gerstenmaier, con el cuadro más significativo, la Virgen de Cumberland de Rubens, como fondo.
Todas las obras forman parte de la colección que el empresario alemán arrancó a principios de los años 70 del pasado siglo XX y que comenzó con la compra de sus dos o tres primeros cuadros que después vio que eran de la línea flamenca, ha dicho Gerstenmaier. “El descubrimiento de la escuela flamenca fue casual, apoyado a través de la belleza. Me dejo llevar a través del ojo y me gustaba por el color, pero no puedo decir por qué me decanto por el estilo flamenco”, explicó. En este sentido, también recordó que cuando tenía 15 o 16 años su deseo era ser jardinero y estar en contacto con la naturaleza, algo que “se expresa en la colección”. También se mostró convencido de que el coleccionismo lo tiene todo el mundo en las venas. “Todos hemos coleccionado algo, sellos, cromos, alguna vez”, enfatizó.
De la religión a las naturalezas muertas, la mitología y el retrato
Para Gerstenmaier, las piezas que atesora su colección conforman un conjunto “magnífico y armonioso” y lo que se puede ver en Zaragoza es “lo más excepcional” y por eso está “orgulloso” de haber llegado a este nivel. La exposición se presenta en las diferentes áreas temáticas que abordaron los pintores flamencos: religión (adoraciones, vírgenes, sagrada familia y resurrección); las naturalezas muertas o bodegones; el paisaje, la mitología y el retrato.
Algunas de las piezas más destacadas que se pueden contemplar son la serie Iconografía de hombres ilustres, de Anton Van Dyck, que es una excelente muestra del acceso al retrato de un mayor número de grupos sociales, gracias a la valoración de la persona por sus propios méritos y la difusión de las técnicas calcográficas. Además de Guirnalda y Adoración de los Reyes, de Adries Daniels y Frans Francken II, representativas de las obras de carácter religioso, un género en el que la producción de los pintores flamencos fue de gran calidad y se caracteriza por el detallismo de técnica y unos colores brillantes y vivos. También se puede ver la serie Los cuatro vientos, de Johan Sadeler I, inspirada en la mitología clásica, y Flores en un jarrón, de Gaspar Pieter Verbruggen I, que representa al género de naturalezas muertas o bodegones que tomó gran importancia en el ámbito flamenco junto al del paisaje, representado en la muestra por el óleo Paisaje de montaña con mulas, de Joost de Momper el Joven y Jan Brueghel el Viejo.
Por su parte, Marisa Oropesa recordó que esta muestra ha viajado por el mundo y ha pasado por ciudades como París, México o Santiago de Chile en lo que es “una oportunidad única de realizar un recorrido a lo largo de dos siglos por la pintura flamenca” y gracias a coleccionistas como Gerstenmaier se puede adentrar “en una época pasada y un lugar lejano, en el sentir de los artistas flamencos que ocupan un puesto privilegiado dentro de la Historia del Arte”.
José Luis Rodrigo resaltó que la colección de Hans Rudolph Gerstenmaier es “una de las mejores del país y en pintura flamenca la mejor y aquí se pueden contemplar obras de una calidad excepcional”.
Más en Cultura
-
“Me parece un milagro que los gaztetxes sigan existiendo”
-
Adrenalized dice adiós después de casi 25 años
-
La carta con la que Buñuel declinó asistir al Zinemaldia de 1960 y otras joyas del archivo del Festival
-
La Diputación estudia reforzar la cubierta de la Universidad de Oñati, tras el impacto de un rayo