Sitges premia el proyecto ‘Singular’, de los donostiarras Alberto Gastesi y Alex Merino

El Pitchbox -se ha celebrado la quinta edición-, organizado por el festival junto con Filmarket Hub -una plataforma online que pone en contacto a creadores con inversores- se basa en la práctica anglosajona denominada pitching. Es decir, una brevísima presentación con la que convencer a empresas del sector potencialmente interesadas en una propuesta.

Con un tiempo limitado de siete minutos, Gastesi y Merino, que competían con otros seis proyectos venidos de todo el mundo -se inscribieron en torno a 250-, defendieron ante el jurado internacional de “un nivel impresionante” y ante los productores asistentes su propuesta Singular, el primer largometraje de ficción que firma este dúo después de haber desarrollado en 2018 el corto Cactus, que fue proyectado en la Seminci de Valladolid.

Entre la defensa y la resolución del tribunal, la pareja de creativos tuvo la oportunidad de reunirse con una decena de productores, que se interesaron por su largo, y a raíz de estos encuentros -y del posterior premio-, tiene ya varias citas sobre la mesa con quienes han pedido leer su guion. Dichas reuniones les pueden servir para alcanzar el siguiente peldaño en la subida para materializar su propuesta: una productora que respalde el largometraje.

El logro de los donostiarras en Sitges es, por lo tanto, mayor, dado que entre la media docena de ficciones presentadas, la suya fue la única que acudió al festival sin contar con una empresa que la apoyase.

“Hubo quien se presentó para lograr el 20% de la financiación final”, recuerda el guionista para escenificar cómo el Pitchbox no era para ellos una estación término, sino el “primer paso” para Singular, que ahora, con el premio, ha visto un verdadero “impulso”.

Dentro del camino que tienen por delante, está en su mente probar suerte en apartados de Industria de otros festivales. No obstante, para seguir, aseguran, necesitan “ir de la mano” de un productor.

Gastesi, por su parte, destaca que independientemente del reconocimiento -tiene una retribución económica de 5.000 euros destinada al desarrollo de la propuesta-, la verdadera oportunidad es la de haber sido seleccionados en Sitges y haber tenido la oportunidad de explicar Singular ante productores de prestigio, aparte de la visibilidad mediática derivada de haber logrado el primer premio -publicaciones especializadas como Variety se han hecho eco tanto de la victoria de la pareja como del proyecto-. “Ayuda a hacer un poco de ruido y diferenciarnos en una época inundada de contenido, donde es muy difícil llamar la atención entre tantas cosas que se hacen en audiovisual”, comenta el director.

trama ¿Sueñan los androides con sus madres? es el lema que puede leerse en el cartel de Singular, una clara referencia al título de la novela que adaptó Ridley Scott para crear su universo de replicantes, ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?

La trama se desarrolla en una casa en un lago y recae, principalmente, sobre tres personajes: Diana es una investigadora de inteligencia artificial que sospecha que su expareja ha creado una réplica para sustituir a su hijo fallecido.

Además de referencias cinematográficas y literarias como Blade Runner o Inteligencia Artificial, Merino destaca que su historia se enmarca en la línea de Ex Machina, de Alex Garland, o La llegada, de Denis Villenueve, en el sentido de “drama existencial” y de ciencia ficción “con un toque poético”.

Pese a todo, matiza, transita por otros derroteros: se trata de un thriller y un drama que puede enfocarse en la ciencia ficción “muy sobria”, si bien este género no asoma hasta la segunda parte del libreto.

“Singular habla de lo que nos hace distintos, singulares e inimitables. Es una oda a la experiencia vital humana”, explica Gastesi, que añade que es una historia “universal” y no localizada, por lo que podría rodarse “en cualquier lugar, idioma y cultura”. “La ciencia ficción es una excusa”, aclaran los dos guionistas, que pasan a citar a Ray Bradbury para intentar ejemplificar el tono que han querido buscar en su largometraje: “Contaba historias del espacio para hablar de nosotros, del ser humano”.

guion a cuatro manos La historia de Singular surge de una idea original de Gastesi que llegó a escribir en un borrador hace años. El director invitó a Merino -llevan tiempo colaborando, incluso, con anterioridad a Cactus- a revisar juntos aquella idea, que acabó traduciéndose en una modificación “radical” en la que, sin embargo, la “semilla” plantada por Gastesi se ha mantenido intacta.

Merino reconoce que todo escritor es “un poco egoísta” y que, por ello, crear a cuatro manos es “complicado”. No obstante, la estrecha relación creativa de esta pareja permite, según el guionista, que se conozcan lo suficiente para compenetrarse, escucharse y ser generosos el uno con el otro.

Durante más de un año, se estuvieron reuniendo en el Café Comercial de Madrid para desarrollar y escribir la propuesta. Además, antes de llegar a Sitges y durante varios meses, Merino y Gastesi estuvieron trabajando con una productora norteamericana que se interesó por Singular y que les guió en el desarrollo del proyecto. Colaboraron codo a codo con aquella, semana a semana. No obstante, los caminos y los intereses acabaron divergiendo. ¿Por qué? “Creemos que querían una película más americana y esta película es más europea”, explican. Ahora, sin duda, ha llegado su verdadera oportunidad.

Premio Sitges Pitchbox. Singular. Director: Alberto Gastesi. Guion: Alberto Gastesi y Alex Merino.

Premio NAFF. Vesper Seeds. Dirección y guion:Kristina Buozyte y Bruno Samper.

Premio Blood Window. Evasión. Director: Cristian Jiménez. Guion: Cristian Jiménez y Manuela Infante.

Jurado. Max Park (editor de Desarrollo en Film4), Jerome Paillard (gerente Ejecutivo en el Festival de Cannes-Marché du Film), Jongsuk Thomas Nam (director Gerente de NAFF en Bifan), Javier Fernández (coordinador de Blood Window) y Mònica Garcia (gerente general del Festival de Cine de Sitges).